El Valencia CF salió goleado en Mestalla ante el Eibar y sufre una de las grandes derrotas de su historia en casa. El Eibar arrolla a un equipo que avergonzó a su afición una vez más esta temporada
VALENCIA. Humillación histórica. El Valencia CF sigue arrastrándose por la competición doméstica y esta vez la 'puntilla' la puso un Eibar que sometió al conjunto blanquinegro a una de las grandes derrotas de su historia reciente en casa. De hecho, al margen de FC Barcelona o Real Madrid, hay que retroceder hasta 1935 para encontrar un partido en el que el Valencia CF perdiera por una diferencia de cuatro goles en su estadio. Un registro escalofriante para el valencianismo.
La realidad es que este Valencia CF está hecho una ruina. El club de Mestalla apenas ha tenido dos partidos para coger un poco de aire antes de volver a enfrascarse en tremenda crisis deportiva que atraviesa el club. El conjunto entrenado por Voro regresó a su imagen de toda la temporada. Un equipo plano, sin ideas y con agujeros por todos los sitios. El Eibar aprovechó la alfombra que le puso su rival para pasearse por Mestalla y darse un gustazo en un campo en el que no conocía la victoria y se marchó con la sensación de conseguir los tres puntos más fáciles de toda la temporada.
El equipo fue un soberano desastre de inicio a fin. Las ausencias de jugadores importantes como Dani Parejo, Enzo Pérez o Nani evidenció los problemas que tiene el Valencia CF para tener una identidad por mínima que sea. Voro optó por dar continuidad al 4-2-3-1 con Medrán de enlace con el ataque pero renunciando al balón por completo. El Eibar lo recogió y fue dominando todas las fases del partido pegando un auténtico repaso a un equipo al que le tiemblan las piernas cuando tiene que dar la cara ante la grada de Mestalla.
El partido pudo ser diferente si Simone Zaza hubiera estado fino en la primera ocasión del partido. El italiano falló un remate al segundo palo con todo para marcar y ahí se acabó las posibilidades del Valencia CF. El Eibar marcó poco después por medio de Sergi Enrich que disfrutó con las facilidades de los dos centrales y ponía el 0-1 antes de que Martínez Munuera se cargara el partido definitivamente.
El colegiado señaló penalti y expulsión de Carlos Soler al filo del descanso por un manotazo a Escalante. Se equivocó. El árbitro solo apreció la respuesta del canterano que intentó zafarse de su rival ya que había sido el jugador del Eibar el que había propinado un golpe en el rostro de Soler previamente. El canterano se quedó atónito con la elección de Martínez Munuera y Adrián dejaba el partido visto para sentencia desde los once metros.
La segunda parte con un hombre menos solo fue una prolongación de la pesadilla que vive Mestalla esta temporada. Dani García hurgaba en la herida con una obra de arte en forma de volea y Enrich ponía la ‘puntilla’ con un 0-4 que indignó a Mestalla por la vergonzosa actuación de su equipo una vez más esta temporada. A pesar del enfado de un Mestalla que se quedó vacío a falta de media hora para el final, Meriton ‘desconoce’ el sentimiento que está instalado en el valencianismo desde la pasada temporada.
Por ello, esta derrota sirve para volver a la realidad que va atravesar esta plantilla para sellar la permanencia y para intentar despertar a Meriton de la complacencia con la que afronta que el Valencia CF se arrastre por el campo desde hace ya dos temporadas.