VALÈNCIA. Un Valencia plagado de canteranos y jugadores del filial cerró este martes la temporada con una victoria por uno a tres ante el CF Benidorm que le permitió alzar el trofeo Juan Fuster Zaragoza en el último compromiso antes de empezar vacaciones.
El amistoso disputado entre el Valencia, que acabó la Liga este domingo, y el CF Benidorm, del que es copropietario David Villa a través de la empresa ’DV7 Group’ con el exdirector de comunicación del Valencia Damià Vidagany o el ex director general del Castellón Jordi Bruixola, buscaba celebrar el ascenso del conjunto benidormí a Tercera RFEF en el estadio Guillermo Amor de la capital turística por excelencia de la Comunitat Valenciana.
Rubén Baraja aprovechó la oportunidad para alinear sobre todo a canteranos y el once inicial estuvo formado por un solo jugador de la primera plantilla, Cristian Rivero, al que acompañaron en defensa Santana, Rubén Iranzo, Álex Serradell y Diego Moreno; Ali Fadal, Borja Calvo, Martín Tejón y Pablo Gozálbez en el medio del campo y Hugo González y Joselu en punta.
El primer tanto para el Valencia, anotado en el minuto cinco de la primera mitad, fue de Diego en propia puerta, mientras que el segundo fue obra de Joselu tras un pase de Borja Calvo dentro del área en el minuto 16, lo que dio paso a un dominio incesante de este joven Valencia, que jugaba ante un equipo que ha disputado la Lliga Comunitat este año.
Tras el descanso, Rivero, que pudo haber disputado sus últimos minutos como jugador del Valencia puesto que acaba contrato el 30 de junio, fue sustituido por Vicent Abril, mientras que el internacional sub-18 Pablo López entró al juego por Hugo González e Iker Córdoba hizo lo propio por Álex Serradell.
Ya en el minuto 78, Joselu marcó el cero a tres que confirmaba la victoria del Valencia, aunque todavía quedaba tiempo para que Javi Cabezas anotara el 1-3 definitivo en el minuto 82, momento que sirvió a Baraja para sacar al terreno de juego a Javi Guerra y Pepelu, que disputaron los últimos minutos de la temporada en un encuentro que congregó a 4.122 aficionados en el campo alicantino.