VALÈNCIA. Un cero a cero en fútbol puede guardar mucho más que el resultado. Para la mira corta hubiera que piense que ese partido dio poco de sí. Si se va al fondo, sin embargo, puede recoger mucho. Y así fue en el derbi, el bautizado como el #derbidelaigualdad, en el Ciutat de València entre el Levante y el Valencia. Sensacional trabajo de los sistemas defensivos de unas y otras -y en eso, claro, parte importante también tienen las porteras-. El negociado tuvo aspectos ligados al trabajo táctico, a ese que se desarrolla en los laboratorios de Buñol y de Paterna. Pero también hubo tiempo para liberarse de eso y romper el partido y mostrar, siempre eso sí, intensidad. Y arriba, en los ataques, por aquello del empate a cero, hubo opciones de calidad por parte de ambos conjuntos, pero bien la falta de efectividad, bien las retaguardias dejaron el derbi con esa igualdad final.
Revoloteó en la previa hasta el exceso eso de las dinámicas que dibujaban cada equipo: las levantinistas, lanzadas; las valencianistas, irregulares y con sendos duros golpes consecutivos ante Betis y Atlético. Además, el partido en el Ciutat de València cerraba la jornada, y unas y otras conocían los resultados de sus rivales más directos. Para las azulgrana, Atlético y Barça no cedieron, mientras que para las visitantes, la cosa estaba en no seguir cediendo puntos respecto al cuarto y quinto puesto.
Con ese marco, la cuestión que se dio fue eso que tienen los derbis, eso que les hace especiales y diferentes: las dinámicas se evaporan, poco tienen que ver, y el rango competitivo se equilibra. Así fue que arrancó el encuentro igualado, sujeto a la pizarra, encorsetado a la táctica, minimizando espacios en las retaguardias y procurando no fallar en las acciones ofensivas con pérdidas no forzadas. Sin romperse ese equilibro entre Levante y Valencia, a las locales se les vio al menos más precisas y a las visitantes se les vio precipitadas, aunque el balón pasó muchos minutos en la zona ancha.
Pero se liberó el Valencia. Empezando como corresponde, por los cimientos, defendió uniendo líneas, con un pulso muy solidario y, sobre todo, secando a Charlyn, Soni, Zornoza y Banini; solo la azulgrana portuguesa Jèssica Silva tuvo algunos de sus fogonazos por la banda. Logrado esto, maniatado el equipo levantinista en lo ofensivo, Natalia Gaitán mandó en el centro del campo, encontrando el buen tono de Carol Férez. Y con eso, y afilando acciones con Débora, Yanara y Coleman, rozaron por dos veces claras el gol. Lo tuvo Yanara y más aún Mandy. Sin goles acabó el primer acto, en el que el Levante mostró buena versión en lo defensivo con Ivana y Ruth, pero estuvo mejor y con mejor pulso el Valencia, que bloqueó a las locales.
Se reanudó el fútbol, el derbi volvió al césped, y ese punto de ajuste a lo táctico se vio en los primeros compases a la vuelta. Pero claro, con el paso de los minutos, eso acabaría por romperse: es la ley del desgaste, que se mezcla con el tiempo que corre hacia el final. Empezó a romperse el asunto. Y camino de la hora de juego, el Levante construyó dos ocasiones clarísimas, pero sin resolver: primero Soni asistió a Charlyn y el remate de la mexicana lo salvó Vreugdenhil; luego, Soni alargó su ingreso en el área para recoger un pase horizontal, pero llegó sin fuerza y se fue fuera por poco.
Lo dicho, el paso del tiempo se tradujo en ese romperse las órdenes, tumbar la pizarra, y potenciar la intensidad y la velocidad. A las tentativas de Charlyn y Soni, replicó Sandra Hernández desde fuera del área con músculo. Y Banini, la argentina mágica, desaprovechó luego la suya cuando la cosa ya entraba en el último cuarto de hora. Por aquello de las dinámicas, la que tuvo el partido ya se deslizó hasta un final en el que ambos equipos se vaciaron brindando un buen partido pese a la ausencia de goles.
Levante UD Femenino: Paraluta; Alharilla, Ruth, Ivana, Lucía (Ona Batllé, m.75); Maitane, Zornoza; Jèssica Silva (Nerea, m.87), Soni, Banini; y Charlyn.
Valencia CF Femenino: Vreugdenhil; Mónica Flores, Carro, Mandy van den Berg, Jucinara; Natalia Gaitán; Sandra Hernández, Carol Férez (Marta Peiró, m.70); Débora (Alejandra, m.60), Yanara (Mari Paz, m.70) y Coleman (Gio Carreras, m.87).
Árbitra: Acevedo Dudley (Comité catalán). Amonestó a Jèssica Silva por el Levante.
Incidencias: Estadio Ciudad de València: 20.198 espectadores, según el dato oficial del Levante UD. Jornada 13 de la Primera División Femenina RFEF de fútbol.