Cuatro mordiscos valencianistas a la yugular de la adversidad en feudo culé

VALÈNCIA. Sería casi imposible explicarlo con palabras. Sería más un reportaje para Íker Jiménez que para hacer una retrospectiva en la sección de deportes. Pero lo bien cierto es que el Valencia CF a lo largo de su historia se ha caracterizado por conseguir triunfos contra pronóstico en el Camp Nou. Cuanto más grande ha sido la dificultad, a priori, más pronósticos ha destrozado el conjunto de Mestalla en cancha culé. Si usted es de los que piensa que lo de esta noche se presenta imposible, lea esto. Igual, hasta le hacemos cambiar su negatividad.

Temporada 87-88, retorno por todo lo alto: si ha habido una debacle dolorosa en la historia del club de Mestalla fue el descenso a segunda división. La temporada 85-86 el Valencia consumó la página más negra de su historia perdiendo la categoría. Un año duró la pesadilla así que para la temporada 87-88, los de Mestalla volvían de nuevo a estar en la élite del futbol español,

Los recién ascendidos se tuvieron que plantar en el Camp Nou frente al todopoderoso Barça de Terry Venables quien venía de ser  subcampeón de liga las dos temporadas anteriores y campeón tres más atrás. El Valencia "de la casa" entrenado por Alfredo Di Stéfano se plantó en el feudo azulgrana con un once repleto de jugadores criados en Paterna. Antonio en portería; Quique, Voro, Bossio, Nando, Revert en defensa; Ciraolo, Fernando, Subirats y Arroyo (Torres) en el centro del campo, y arriba Emilio Fenoll (Ferrando).

En el minuto 20 Emilio Fenoll entra por la derecha a pierna cambiada, apura y pone un pase raso atrás y Carlos Arroyo la pone en la portería de Zubizarreta, 0-1. A partir de ahí, el asedio del Barça fue tremendo con un Antonio (padre de Toño, actual defensa del Levante UD) parándolo todo y con un heróico partido de Miguel Angel Bossio con un aparatoso vendaje en la cabeza intentando cubrirle una brecha producida tras un choque con Schuster. 

El Valencia se llevó los tres puntos, la primera gran alegría en su retorno a la élite y de paso se llevó por delante a Terry Venables, a quien la directiva de José Luis Núñez destituyó tras aquel partido.

Temporada 97-98, el comienzo de la leyenda del Piojo López: nada que en los 90 y 2000 causara más terror en Barcelona que la figura de Claudio Javier, "el Piojo" López. Con sólo pronunciar este nombre en los finales de los 90 y principios de los 2000 podías provocar que cualquier culé huyera despavorido y sin consuelo.

Todo comenzó con la increíble remontada de la jornada 21 de la temporada 97-98. El Valencia llegaba maltrecho e intentando rehacerse al Camp Nou. Lo hacía decimoquinto con veintidós puntos, mientras que el Barça lideraba la liga con el doble, cuarenta y cuatro.

El Barça golpeó de manera inmisericorde a un Valencia que no estaba haciendo un mal partido. Los de Ranieri comenzaron con Zubizarreta;  Anglomá, Soria, Cáceres, Djukic, Carboni; Milla, Mendieta, Farinós; Piojo López e Ilie. Pero en el minuto 4 de la segunda parte, Cáceres en propia meta parecía cerrar un encuentro que previamente habían abierto Rivaldo y Luis Enrique en la primera parte, 3-0. Pero ya al descanso Ranieri hizo un cambio que a la postre sería decisivo, quitó a Milla y sacó a Ariel Ortega.  En el minuto 59 Cáceres dejó su puesto a Juanfran y en el 65 Moriggi entraba por Mendieta...

En el 69 Moriggi bate de una manera muy poco ortodoxa (pateó más el pasto que la bola) a Ruud Hesp (3-1), y a partir de aquí el mundo giró al revés. En el 73 y en el 88 Claudio López hacía el 3-2 y el 3-3. Y cuando el Barça aún no se lo creía apareció Ortega para meter el 3-4 y volverse loco de contento (tanto que se quitó la camiseta en la celebración del tanto, vio la segunda amarilla y acabó expulsado). Una remontada histórica para comenzar a escribir la leyenda del Piojo. El insecto que más picores provocó en la historia del club culé.

Temporada 2013-14, Alves y Alcácer sorprenden al Barça en pelo "Moneyball": intentado rehacer el desastre de verano se encontraban Rufete y Pizzi. el equipo llegaba al Camp Nou perdido en la tabla, (jornada 20, noveno con venticuatro puntos) y además Rufete había cambiado media plantilla sobre la marcha entre salidas y entradas. En una de las operaciones el Valencia "se come" a Vinicius y necesita sacar a un futbolista de la plantilla para dar entrada a Otamendi. La noche anterior al partido es muy tensa y los testigos presentes aseguran que poco faltó para llegar a las manos entre Amadeo Salvo y Ricardo Costa, al que se le quería dar salida hacia Turquía con la negativa del luso.

Aún con todo eso el portugués salió en el once inicial de un Valencia CF que aquella tarde formó con Alves; Barragán, Costa, Mathieu, Bernat; Romeu, Fuego, Parejo (Míchel); Feghoulí, Alcácer (Vargas) y Piatti (Fede Cartabia). La cosa comenzaba pronto a torcerse, Alexis en el minuto 7 hizo el 1-0 en un Barça que en los primeros minutos fue vendaval sólo sujetado por un portentoso Diego Alves. Pero alrededor del minuto 30 el Barça que víctima de la autocomplacencia y el Valencia comenzó a crecer. En el minuto 44 Dani Parejo empataba el encuentro.

La segunda parte fue mucho más del Valencia con un gran partido de la tripleta Romeu, Fuego, Parejo. Y los de Pizzi además estaban mucho más metidos en el partido. Tanto como para que el más bajito, Piatti, hiciera de cabeza el 1-2 en el 48 aunque la alegría no iba a durar mucho. Perez Montero se encargó de señalar uno de esos penaltis que se pitan siempre a favor de ciertos equipos y nunca en su contra para que empatara Messi seis minutos más tarde. 

Aún así, Paco Alcácer comenzó a labrar su carrera en primera división con partidos como este. Apareció en una muy buena maniobra de "nueve" para poner el 2-3 en el minuto 59. De ahí y hasta el final, las prodigiosas paradas de Alves se encargaron de escribir en la historia otro de esos triunfos con los que nadie contaba a priori.

Temporada 2015-16, dieciocho pases seguidos para el único partido memorable de la temporada: La temporada de Nuno, de Neville, de Suso, de Ayestarán, de Alesanco, del 7-0 en Copa... Todo para olvidar. Todo excepto aquel partido hacia el final de la temporada en el Camp Nou. Tras un triunfo agónico ante el Sevilla en el último minuto y dentro de las tres únicas victorias que tiene Ayestarán como técnico en la máxima categoría del fútbol español.

En un Valencia CF que se presentó sin pretensiones ningunas en el Camp Nou con Alves en portería; Barragán, Mustafi, Abdennour, Siqueira; Fuego, Gomes, Enzo (Cancelo), Parejo; Rodrigo (Gayà) y Mina (Alcácer). Se avanzaría pronto el Valencia con un centro de Siqueira que introduciría Rakitic en su portería a los 24 minutos. Pero la jugada del año vino en el minuto 44 para hacer el 0-2. Dieciocho toques seguidos dieron los de Ayestarán en una acción extraordinaria con pase filtrado de Dani Parejo para que Santi Mina hiciera el segundo gol antes del descanso.

La segunda parte fue de asedio y en el minuto 63, Messi pudo batir a Diego Alves. Fue la única vez aquella noche en la que el argentino pudo hacerlo.  Hasta la jugada final apretó el Barça, pero esa victoria contra pronóstico 1-2,  se vino para Mestalla.

Así que si usted piensa que lo de hoy esta imposible, mire estos cuatro casos. Igual cambia de idea.