VALENCIA. PSPV y Compromís consiguieron cerrar este martes el nuevo organigrama de la Generalitat Valenciana tras una nueva reunión de la comisión negociadora. Un encuentro en el que se abordó la distribución del segundo escalón del Ejecutivo y el reparto de altos cargos y asesores que tendrá el gobierno. 

Tal y como se había venido apuntando, la estructura del organigrama quedará adelgazada en el número de secretarios autonómicos y directores generales, aunque de manera ligera, si bien sí se acometerá un recorte más importante en el apartado de personal de confianza. 

En cuanto a la concreción de algunas novedades, fuentes de la negociación señalaron que las conselleries estarán pobladas de altos cargos de distinto signo político: es decir, que habrá algún secretario autonómico y director general del PSPV en los departamentos que lidere Compromís y viceversa.

Así, este martes ambas formaciones acordaron reducir de 18 a 14 las secretarías autonómicas y de 53 a 49 las direcciones generales. El recorte más importante se producirá en el capítulo de asesores, que pasarán de 7 a 4 por conselleria (3 por conseller y 1 por secretaría autonómica), reduciendo 24 altos cargos de libre designación.

Pese a que inicialmente los socialistas propusieron eliminar las secretarías autonómicas, desde Compromís se puso el foco de la negociación en la reducción de otro tipo de puestos como el del personal eventual. De esta manera, el acuerdo en este punto se ha limitado a dejar una secretaría autonómica por consellería excepto en algunas carteras, donde se ha autorizado una segunda por la diversidad de competencias del departamento en cuestión.

Este es el caso de Educación y Cultura, que contará con dos de estos cargos, así como Agricultura y Medio Ambiente. Además, tanto la Presidencia de la Generalitat como vicepresidencia, sumarán dos secretarías autonómicas, en la primera de ellas una corresponderá posiblemente al área de Turismo, que dependerá directamente del futuro jefe del Consell, Ximo Puig, tal y como ha pedido el PSPV.

Asimismo ayer se acordó la necesidad de revisar y eliminar todos aquellos puestos de funcionarios interinos que realicen tareas de asesoramiento. Ambas formaciones destacaron que la nueva estructura supondrá, de inicio, un ahorro para los valencianos de más de dos millones y medio de euros. 

Así, según el comunicado conjunto de PSPV y Compromís, la nueva Generalitat tendrá "un modelo austero que reduzca altos cargos y puestos de confianza".