VALENCIA. El seleccionador español, Vicente del Bosque, aseguró hoy que tras el varapalo que recibió la Roja en el Mundial de Brasil en 2014, el equipo llega a la Eurocopa de 2016 con gran responsabilidad por defender el título pero sabiendo que la derrota es una posibilidad.
"Asumimos que estuvimos débiles en Brasil (...). No nos creemos los mejores ni imbatibles y eso siempre es una buena partida de inicio", declaró Del Bosque en París un acto de presentación de la competición a 100 días de que arranque el torneo en Francia.
La mayor dificultad con la que cuenta el técnico español, a tres meses de la inauguración, es el estado de forma en el que llegarán los jugadores, con un calendario de clubes exigente.
"Tenemos buenos jugadores. Tenemos mecanismos atrás ya asumidos. Pero también tenemos unas competiciones de clubes muy duras en la Liga y luego, normalmente, los clubes españoles van a estar en las competiciones de Liga de Campeones y Liga Europa hasta el final y eso trastoca un poco nuestros planes, aunque queremos que lleguen hasta el final, si es posible", dijo.
Del Bosque no quiso destacar a España como la favorita para lograr su tercera Eurocopa consecutiva y se limitó a colocar a su equipo entre las siete selecciones con más opciones, sobre el papel.
"En teoría, todo es teoría, luego la realidad puede ser cualquier otra. Pero si es cierto que hay seis grupos con seis cabezas de serie, más Italia, seguramente, que no forma parte de esas cabezas de serie pero que también es una selección muy poderosa", señaló.
No obstante, el entrenador español concedió que la condición de vigente campeona de España le añade una "responsabilidad" suplementaria.
"Tenemos mayor responsabilidad. Tenemos que hacer las cosas bien y la lección cuando pierdes es importante", dijo en referencia a la eliminación en la fase de grupos en el Mundial de Brasil.
Agregó que "no hay que confiarse" en Francia, si bien hay "un colchón" en la fase de liguilla de la Eurocopa, pues clasifican hasta tres de cuatro equipos por grupo, que España comparte con Croacia, Turquía y República Checa.
"Es una gran responsabilidad para nosotros porque somos los actuales campeones y queremos defender el título".