CASTELLÓ. La falta de acierto del Castellón de cara a puerta alcanzó su máxima expresión frente al Atlético Sanluqueño, en un partido en el que los albinegros desaprovecharon una tras otra la miríada de ocasiones que tuvieron para marcar. En ese choque, disputado el viernes en Castalia, se agudizó el problema de efectividad que viene afectado a los hombres más adelantados del conjunto orellut.
Estos males llegan en un momento de la temporada especialmente difícil para la línea atacante del conjunto de Sergi Escobar, cuyos componentes se han visto condicionados por las lesiones que sufrieron durante la pretemporada. Y es que tres de los cuatro atacantes del equipo de la Plana, David Cubillas, Juanto Ortuño y César Díaz, se vieron afectados durante el verano por problemas físicos que ralentizaron su puesta a punto. De hecho, el albaceteño aún no ha podido debutar en Liga por esta razón.
Para colmo, el único delantero que sí ha estado en condiciones desde el inicio de los entrenamientos, Mario Barco, recibió una sanción de cuatro partidos tras su expulsión ante el Linense, lo que dejó al Castellón con solo dos atacantes disponibles para recibir al Sanluqueño.
El elegido por el técnico albinegro para ser el referente ofensivo el pasado viernes fue Ortuño, un hombre llamado a liderar los registros goleadores del Castellón, pero que está a años luz de la versión arrolladora que mostró hace dos temporadas, cuando se incorporó en el mercado de invierno y contribuyó de forma notable al ascenso.
El murciano pasó de ser el héroe del ascenso con su gol en la final del play off de la temporada 2019/20 a perder protagonismo en los esquemas del equipo a partir del siguiente curso, en parte debido a las lesiones que ha ido sufriendo. Ahora está tratando de recuperar la continuidad, pero su nivel aún dista mucho del que mostró en otros tiempos.
Cubillas es el único delantero que ha visto puerta en el Castellón en lo que va de curso gracias al tanto que marcó al Sevilla Atlético y que permitió certificar la victoria albinegra en la recta final. El castellonense está cumpliendo con su papel, pero los orelluts necesitan más aportación en esa línea.
El próximo sábado, ante el Cornellà, el Castellón seguirá con escasez de efectivos en punta con la baja segura de Barco y la duda de César Díaz, quien en caso de estar recuperado no jugaría de inicio. Será otra oportunidad para que los delanteros disponibles demuestren su capacidad para paliar una sequía que ha privado al Castellón de puntos importantes en la tabla clasificatoria.