VALÈNCIA. Tres fatídicos minutos castigaron al CAU en su visita a Hospitalet. Un partido que dominaba, aunque no de manera clara, se fue al traste a diez minutos del final cuando los catalanes encadenaron dos jugadas brillantes para ponerse por delante en el marcador. Los intentos posteriores del CAU por conseguir la victoria en esos minutos finales fueron estériles a pesar de que dispuso de dos touch en la 22 para buscar el ensayo. Al final 21-17 y amargo sabor de boca tras un enfrentamiento donde se dominó la mayor parte del tiempo.
El CAU salió en la primera parte con la idea fija de dominar el partido pero los los locales se adelantaron una transformación de un golpe de partido en el minuto 3. Reaccionó el equipo valenciano que era más fuerte que los catalanes en su juego de delantera. Con un ensayo y una amarilla sancionada a Hospitales tomo ventaja el CAU en el marcador hasta un 3-14 en el minuto 20. Pero nunca es fácil jugar contra el Hospitales y aunque parecía que el juego lo dominaban los visitantes un ensayo local dio vida a Hospitales que se colocó en el marcador con 11-14. Un golpe trasformado por Joan Terol dejó el marcador en el descanso en 11-17 y anestesió el brío local que buscada voltear el resultado en una primera parte igualada donde CAU fue un poco mejor.
La segunda parte fue un toma y daca donde ninguna equipo se acercaba con peligro a la 22 rival. Trato de aumentar la diferencia con un golpe lejano Terol, pero no lo consiguió. No dominaba nadie o mejor dicho la igualdad era evidente entre dos equipos que luchaban con el alma cada metro. Hasta el minuto 29 todo siguió igual pero un golpe cometido por el CAU sirvió. a Hospitales para reducir distancias y dejar el marcador en sólo tres de diferencia. Fue un autentico revulsivo porque dos minutos después ensayó el conjunto catalán para ponerse por delante 21-17 ya que también trasformó el tiro a palos. El final del choque fue apasionante. Hospitalet defendía a muerte lo que tanto le había costado conseguir, el CAU tratar de recuperar un botín que se le fue de las manos en un tris-tras. El intenso final del choque se lo llevó el equipo catalán que defendió bien los ataques de su rival sin que se moviera el marcador.