VALÈNCIA. El defensa de la Real Sociedad Diego Llorente, exjugador del Real Madrid y que ha recalado en propiedad en el conjunto donostiarra tras su cesión al Málaga, se ha mostrado satisfecho de su elección y cree que "era una gran oportunidad que tenía que coger".
El central blanquiazul, en declaraciones a la web del club desde la concentración en la localidad holandesa de Ermelo, ha contestado a los aficionados que le han preguntado a través de las redes sociales sobre sus objetivos y su proceso de acoplamiento.
Llorente ha destacado el paso adelante en su carrera que ha supuesto su fichaje de larga duración -cinco temporadas- por el equipo de Eusebio Sacristán, y ha dicho que espera "aportar a la Real" y que la Real me aporte a él en su proceso de maduración.
Considera que va a tener oportunidades de sobra para ayudar a su nuevo equipo porque "se van a jugar muchos partidos de Liga, Copa y Europa League" y confía en poder alcanzar "la mejor versión posible" a nivel personal y colectiva.
El jugador madrileño ha destacado también la historia y el fútbol de la Real, un club "histórico que va a más", y subraya que en sus enfrentamientos cuando militaba en el Rayo Vallecano o Málaga siempre "tocó sufrir" ante sus ahora compañeros.
Llorente ha ofrecido "trabajo y el sacrificio", valores que considera han sido su seña de identidad en una carrera profesional que espera prolongar con éxito en San Sebastián junto a un grupo humano del que está contento, especialmente con el exjugador del Málaga Juanmi Jiménez, compañero de habitación en la concentración holandesa.