Einer Rubio corona Crans Montana en otra etapa insulsa en el Giro

VALÈNCIA. El ciclista colombiano Einer Rubio (Movistar Team) ganó este viernes la recortada e insulsa decimotercera etapa del Giro de Italia, finalmente entre Le Chable y Crans Montana sobre 74,6 kilómetros, al aprovechar la batalla entre sus compañeros de fuga Thibaut Pinot (Groupama-FDJ) y Jefferson Alexander Cepeda (EF Education-EasyPost), con Geraint Thomas (INEOS Grenadiers) todavía líder de la general.

Pinot y Cepeda se enzarzaron en una batalla dialéctica, con ataques y contraataques continuos, que provocaron que se fueran quedando sin energía. Rubio, por su parte, se mantuvo al margen, fue diésel y, cuando vio hueco, atacó con todo para sentar al francés y al ecuatoriano y lograr el primer triunfo para el Movistar en este Giro.

Para Einer Rubio es su segunda victoria profesional, sumadas ambas este año tras la lograda en el UAE Tour. En esta ocasión, esperó su oportunidad, leyó a la perfección la situación de la etapa y cuando llegó el momento clave atacó con todo lo que tenía, para soprender al dúo formado por el gruñón Pinot y el picado Cepeda, a los que sacó 6 y 12 segundos en meta.

Estos tres ciclistas, que formaban parte de una fuga que se consolidó con cinco integrantes --Valentin Paret-Peintre (AG2R Citroën Team) y Derek Gee (Israel-Premier Tech) se quedaron descolgados--, atacaron ya en la primera subida a la Croix de Coeur (15,5 kilómetros al 8,6 por ciento) y tuvieron el beneplácito del gran grupo.

No obstante, Pinot no luchaba únicamente por la etapa, que se le escapó. También luchaba por reengancharse a la general, ya que estaba a 4:48 minutos de Geraint Thomas y, tras esta etapa, se pone a 3:13 y en la décima plaza, ganando cinco puestos. Pero, sobre todo, el galo se llevó la 'maglia azzurra' de líder de la montaña, arrebatada a Davide Bais (EOLO-Kometa) en esta jornada.

Por detrás, entre los hombres de la general, nada. Y viene siendo la tónica en este Giro de Italia marcada por la lluvia, el frío, las bajas, las caídas y los abandonos por coronavirus. Pese a que la etapa, recortada, podía ser explosiva el líder Geraint Thomas (INEOS Grenadiers) no tuvo que responder a ningún ataque y los aspirantes llegaron en grupo, a 1:35 de Einer Rubio.

Sí que es cierto que este Giro de Italia está siendo muy duro a nivel de concidiones climáticas. Con mucha lluvia en varias etapas, con más frío de lo esperado, y que ello está mermando al gran grupo y a varios de los equipos. Pero el ciclismo ya debe contar con ello, al ser un deporte al aire libre. Y el Giro, que suele ser la 'grande' más explosiva y emocionante, está siendo demasiado flojo a nivel deportivo en esta 106ª edición.

"Dadas las condiciones climáticas adversas, especialmente en el lado italiano, la Comisión decidió atender las solicitudes de los atletas aplicando el Protocolo de Clima Extremo. La etapa 13 se acortará y el nuevo kilómetro 0 se establecerá en Le Chable, al pie de la Croix de Coeur. La parte final de la etapa permanece sin cambios", confirmaron los organizadores de la 'corsa rosa' este mismo viernes.

Un nuevo panorama que abría la posibilidad de atacar en esa dura Croix de Coeur dado que tras la larga bajada había unos kilómetros de llano y la subida final, larga y tendida, a Crans Montana (13 kilómetros al 7,2 por ciento de pendiente media). Incluso, de meter a compañeros en una fuga. Pero no fue así. Pinot fue lo más destacado junto a un ataque de Hugh Carthy (EF) que apenas le valió para subir del 12º al 11º puesto.