VALÈNCIA. El Atlético Levante UD sumó un punto en el Municipal de Peralada (0-0) que pudieron ser tres si los granotas hubieran materializado alguna de las ocasiones de las que disfrutaron a lo largo del encuentro. Cierto es que los catalanes también gozaron de ellas pero primero Dani Cárdenas y, cuando fue sustituido por lesión, también Picón, se encargaron de desbaratarlas. Un empate que incrementa hasta seis el número de jornadas consecutivas sin perder de los pupilos de Tevenet, con tres victorias y otras tantas igualadas en este tramo de la temporada que suponen un pilar fundamental para levantar el edificio del objetivo azulgrana.
El encuentro, aunque finalmente el marcador no tuvo movimientos, fue bastante vibrante. De hecho, cuando sólo había transcurrido algo más de un minuto Boselli ya tuvo una ocasión muy clara al cabecear un buen centro de Maxi Villa ligeramente desviado. Fue el primer aviso de los locales y, aunque el partido se jugaba más en las cercanías de la portería catalana, no hubo un acercamiento con peligro hasta que Anthony Georgiou la bajó en tres cuartos de campo y envió el pase de la muerte para que la zaga local se la arrebatase de las botas a Juan Delgado. Eran los momentos en que más apretaban los hombres de Tevenet. Alcanzado el ecuador del primer tiempo, primero Shaq Moore con un zapatazo que se marchó fuera y luego Pepelu, que empalmó de forma defectuosa un centro medido de Georgiou, la tuvieron en sus botas. El Peralada se encargó de rebajar esta euforia con una volea preciosa de Boselli, tras bajarla con mucha clase dentro del área, que no encontró la escuadra de milagro. De hecho, las tornas cambiaron y Cárdenas tuvo que protagonizar una gran intervención para evitar que Pau Miguélez adelantase a los suyos. El meta tuvo que ser sustituido tras esa acción y Picón también apareció para desbaratar un remate a bocajarro de Pachón.
Las espadas estaban en todo lo alto y el primer en golpear fue el Atlético Levante UD tras cabecear a la red Juan Delgado un envío teledirigido de Cantero. Sin embargo, el colegiado anuló el tanto por posición antirreglamentaria del alicantino. Con ese aviso serio de los granotas expiraba el período inicial. Y no iba de farol el equipo dirigido por Tevenet, que obligó al cancerbero Marc Vito a multiplicarse en la segunda mitad para evitar el 0-1. En primera instancia, ante un cabezazo de Shaq Moore y, poco después, para repeler un zapatazo de Juan Delgado desde la frontal. Pintaba bien la cosa para el filial aunque, en el tramo final del encuentro, hubo que apretar los dientes después de que Arturo Molina viese la segunda amarilla. Picón estuvo muy rápido para anticiparse a un disparo de Pachón y, en el último suspiro, los granotas se llevaron un buen susto cuando Teo remató un servicio de córner lamiendo el poste. Finalmente, el 0-0 no se movió del luminoso y hubo un reparto de puntos que, con méritos de unos y otros en la balanza, hace justicia para dos equipos que llegaban en buen momento a esta jornada.