VALENCIA. En el Villamarón tanto Betis como Deportivo demostraron tener trabajo por delante, con la diferencia básica de que los gallegos suman ya cuatro puntos en la parte alta de la tabla. Los de Gaizka Garitano estuvieron cojos en ataque sin un Lucas Pérez que apunta al Arsenal. Solo Florin Andone, el Depor no supo generar ocasiones.
Como en la victoria ante el Eibar, el cuadro coruñés tampoco tuvo excesiva presencia en el centro del campo, pese a la voluntad de Fayçal Fajr. En el Betis, más allá del momento de la temporada y los cambios en el equipo, se echó de menos un punto más de intensidad. Después de la derrota en el Camp Nou, el estreno en casa exigía más.
Así lo mostraron en los primeros minutos, con juego por bandas y un Sanabria activo. Pronto llegaron los desajustes en el equipo de Gustavo Poyet, con líneas separadas y una presencia ofensiva que casi se resumió en varios saques de esquina, también en el segundo tiempo. Mandi tuvo un remate sin oposición ya cerca del descanso, pero el marcador parecía inamovible.
Tras el descanso Bruno Gama siguió siendo lo más vertical en los visitantes y un disparo suyo rozando el palo comenzó a encrespar al Villamarín. El inicio de los pitos espoleó a los de Poyet, de nuevo probando al meta rival con Sanabria. El Depor logró cortar el ritmo con algo de posesión y el Betis quemó naves sin éxito con Musonda.