El jugador argentino se ha convertido en una pieza básica para el Valencia pero los continuos problemas físicos le privan de la continuidad que necesita la entidad de Mestalla en estos momentos
VALENCIA. El centrocampista argentino Enzo Pérez es seria duda para el compromiso de este miércoles ante el Granada, como ha manifestado el técnico Gary Neville en la rueda de prensa previa de este pasado martes. El futbolista no ha trabajado con el resto de sus compañeros ni lunes ni martes y lo más probable es que no viaje a Málaga, tras sufrir una contusión en el soleo el pasado domingo en el choque ante el Athletic.
Las lesiones están siendo el talón de Aquiles de Enzo Pérez en su etapa en el Valencia, donde no termina de enganchar cinco partidos consecutivos debido a los continuos problemas físicos que arrastra desde su llegada a la entidad valencianista el pasado mes de enero de 2015. El jugador se ha convertido en indispensable para el equipo, que sigue acusando sobre manera las ausencias del argentino.
Este aspecto es el que le está impidiendo dar el nivel y la regularidad que se esperaba cuando el Valencia le fichó el pasado mercado invernal previo pago de 25 millones de euros al Benfica. Los aficionados esperaban a ese futbolista que comandaba el centro del campo del cuadro lisboeta y que fue nombrado mejor jugador de la Liga lusa, un nivel que ya está mostrando en la entidad de Mestalla pero con el problema de la continuidad fruto de las continuas lesiones.
Y es que, en poco más de un año el centrocampista ha sufrido seis lesiones que le han hecho perderse más de veinte partidos y que le han frenado en momentos importantes su progresión en la entidad de Mestalla, algo poco habitual en un futbolista que en el Benfica únicamente sufrió una lesión grave en su primera etapa, que le alejó de los terrenos de juego tres meses por un problema en la rodilla.
Su llegada a Valencia estuvo marcada por su pronto debut ante el Real Madrid donde cuajó un gran partido, pero tras este encuentro su rendimiento estuvo muy por debajo de lo que se esperaba de él, pero cuando empezó a aclimatarse al equipo, dos meses después de su llegada sufrió una lesión muscular importante que le alejó de los terrenos de juego casi dos meses, lo que sería el inicio de un calvario que le acompaña a día de hoy.
Tres recuperarse de la lesión, en el tramo final de la temporada no terminó de entrar pero se esperaba que en esta campaña fuera diferente. Durante la planificación estival, Enzo Pérez era uno de los pilares del equipo para esta temporada y el argentino comenzó la temporada siendo pieza clave, tanto en la pretemporada como en la previa frente al Mónaco.
Su primera lesión esta campaña llegó ante el Olympique de Lyon en Francia, donde sufrió un desgarro en el gemelo derecho que le impidió medirse al Athletic Club de Bilbao, viajar con su selección en el parón de principios de octubre y enfrentarse al Málaga en la vuelta a la competición.
Tras recuperarse de este problema en el gemelo, el centrocampista sufrió problemas en los isquios en el partido frente al Zenit de San Peterbusrgo, a finales del mes de noviembre, que llevó arrastrando hasta que se lesionó en el compromiso frente al Lyon, en el debut de Gary Neville en el banquillo valencianista, que le alejó un mes de los terrenos de juego.
Enzo regresó frente al Granada en la ida de la Copa del Rey y un partido después, ante la Real Sociedad en Anoeta sufrió una contusión en la rodilla que le impidió terminar el partido. Durante el regreso a Valencia se temía por una grave lesión pero finalmente fue más un susto, aunque le afectó al ligamento.
El argentino volvió nuevamente en Copa del Rey, ante Las Palmas en estadio Gran Canaria donde el Valencia consiguió el pase a semifinales y en el siguiente encuentro, ante el Sporting en Mestalla volvió a lesionarse al sufrir una fractura en el pómulo tras un golpe en un salto de cabeza. Esta lesión le impidió estar en las sefinales de Copa ante el Barça y frente al Betis en Liga.
Enzo Pérez tras una semana de baja volvió a los terrenos de juego, eso sí, con una máscara que le protege de la intervención sufrida en el pómulo. Neville le reservó en la eliminatoria frente al Rapid y fue clave en las victorias ante Espanyol y Granada. Frente al Athletic volvió a sufrir molestias que no revisten gravedad pero le alejan de los terrenos de juego.
Gary Neville manifestó a su llegada y tras la lesión sufrida ante el Lyon que no iba a forzar al jugador y que esperaba que cuando se recuperara, esperaba que fuera para jugar lo que resta de temporada puesto que es un futbolista muy importante para su esquema, sin embargo, es algo que no está consiguiendo ya que tras esta lesión ha sufrido tres más en lo que llevamos de 2016.