VALÈNCIA. El Hércules CF ha apostado por rejuvenecer su plantilla para la próxima temporada ya que seis de los siete fichajes realizados hasta el momento no superan los 25 años y, además, ha prescindido en su plantilla de varios futbolistas que superaban la treintena.
A excepción del atacante Carlos Martínez, de 31 años y vieja aspiración del club alicantino, el resto de las incorporaciones destaca por su juventud, si bien la mayoría de ellas son jugadores destinados a cubrir algunas de las seis licencias sub-23.
El central Álvaro Pérez, procedente del Mestalla, cuenta con 22 años, los mismos que el portero Ferrán Ferri, quien procede del Mallorca. Pol Roigé, que también procede del conjunto balear, cuenta con 24, mientras que Rubén Molina 'Nani', del filial del Villarreal, suma 20.
Además, Pablo Íñiguez, central fichado del Reus, cuenta con 24 años, por los 19 del colombiano Jorge Alvarado, cedido por el conjunto inglés del Watforf.
Por el contrario, han salido de la plantilla alicantina jugadores con una enorme experiencia que elevaban la media de edad de forma notable, como el capitán Paco Peña, de 40 años, el delantero Óscar Díaz, de 33, o el central Mikel Santamaría y el centrocampista José Luis Miñano, ambos con 30.
Chechu Flores, con 36 años, el meta Ismael Falcón, con 34 y el central Samuel Llorca, con 33, se quedan como los jugadores más veteranos, hasta el momento, de la plantilla herculana para afrontar la quinta temporada consecutiva en Segunda B.
La apuesta por la juventud también se nota en el banquillo, en el que el Hércules contará con Lluis Planagumà, de 37 años. El técnico catalán es sensiblemente más joven que Gustavo Siviero, Claudio Barragán y Josip Visnjic, los tres entrenadores del pasado curso.