VALÈNCIA. La plantilla del Levante completó este viernes una sesión de trabajo poco habitual, ya que ante el mal estado del terreno de juego de la ciudad deportiva de Buñol como consecuencia de las fuertes lluvias, se trasladó a un pabellón a cubierto en Valencia para practicar fútbol-playa y voléy-playa.
En una amena sesión de trabajo, los jugadores del Levante disputaron distintos partidos de fútbol y voleibol sobre la arena para cerrar la semana de trabajo.
La plantilla del Levante descansará durante el fin de semana y regresará al trabajo el próximo lunes, aunque en el momento de la vuelta, Paco López mantendrá las bajas por lesión de Rubén Rochina y Antonio Luna.
A partir del mismo lunes, el técnico valenciano empezará a recuperar de forma progresiva a los siete jugadores internacionales que disputan estos días partidos con sus respectivas selecciones.