VALÈNCIA. La historia se cruza en el camino del Levante hacia la permanencia en Primera División. El conjunto granota tendrá que ganar en Mestalla, algo que nunca en su historia ha conseguido, si no quiere decir adiós virtualmente a la élite, en la que en todo caso se mantendría tras una escalada de puntos que nunca nadie ha conseguido para salvar la categoría. Es ese el otro hito que los de Alessio pueden conseguir: si el récord de encuentros consecutivos sin ganar ahora está en 27 -marcado por el propio club granota esta temporada-, nunca un equipo que ha enlazado más de 20 citas sin victoria en la élite ha logrado evitar el descenso. Son los fantasmas ante los cuales luchará el cuadro azulgrana este sábado.
Mestalla es territorio sin conquistar por los levantinistas. Aunque en el Ciutat sí se han visto grandes victorias granotas en derbis en las últimas temporadas -sin ir más lejos, el pasado curso-, en la Avenida de Suecia el Levante sí ha firmado momentos que quedarán en los anales, pero nunca en forma de victoria. Aún así, el primer punto que rascó en Mestalla data de la 2007/2008, aunque no sirvió en ese caso para eludir la Segunda División. Sí varios cursos más tarde, cuando otro 0-0 complicó la vida al cuadro blanquinegro, y al visitante le otorgó la salvación, esta vez sí. De ahí, el cómico y eterno gesto de Ballesteros en el coliseo valencianista al lograr aquella salvación.
Más tarde se han producido otros resultados. Desde el empate a uno logrado en el descuento por aquel penalti estúpido de Dikahaby en el primer partido liguero post-pandemia, a la derrota por 4-2 en el último derbi disputado en Mestalla. Fue en 2020 -los dos siguientes se han jugado en Orriols- y entonces el Levante visitaba al Valencia más mermado en años. Con Javi Gracia al mando y la venta masiva de futbolistas por parte de Meriton recién escrita en la historia oscura de la entidad. Un gran Morales no fue capaz de doblegar a un Valencia que resurgió tras una segunda parte fatal de la escuadra de Paco López.
Ya sería histórico que el Levante lograse ganar en Mestalla. Y tiene ante sí una de sus mejores oportunidades de siempre. Si aquel Valencia de 2020 llegaba desvalijado desde dentro, este lo hace vencido tras perder la final de Copa y, con ella, sus posibilidades de Europa la próxima temporada. Eso sí, más histórico sería un triunfo en la Avenida de Suecia si, a la postre, supone una permanencia. Para eso los de Alessio tendrá que desbloquear otra pantalla, en este caso más actual: ganar por fin dos choques consecutivos. Tendrá que hacerlo en las cinco fechas que le restan al campeonato para poder llegar a los 35 puntos que, este año, pueden significar permanencia.
En caso de que eso se produza, el cuadro granota habrá roto la telaraña de los encuentros consecutivos sin ganar. Es el Levante quien hoy ostenta tal récord por delante del Sporting de Gijón, que lo había fijado en 24 en el 98. Es decir, los de Orriols rebasan tal plusmarca en tres duelos y, por supuesto, aquel Sporting no logró permanecer en la élite toda vez que, también en su ejemplo, la cuenta recogía partidos de dos temporadas distintas (finales de una e inicios de la posterior). Antes, el Osasuna encadenó 21 citas sin triunfo. Fue en 2017 y también costó un descenso. En caso de salvación, tal lastre sería eliminado de los datos históricos de La Liga.
Otro asunto a desbloquear: el corte de puntos. El Deportivo de la Coruña y el Granada son los dos clubes que más barata han dejado la permanencia desde que La Liga cuenta sus tirunfos de tres en tres. 35 puntos fue en ambos casos la nota de corte. Para lograr tal puntaje el Levante tendría que conseguir 10 de los 15 que restan, algo que entra solo en las mentes más positivas del respetable granota. Podría ser suficiente esa suma para mantenerse en la élite, incluso un montante menor podría hacer al club permanecer en Primera. El Levante puede derrocar, si se salva, otra barrera: la permanencia más barata de la historia del campeonato español.