El Levante necesita un esprint final como el de 1980 y esperar que fallen sus rivales

VALÈNCIA. El Levante debe vencer en los tres últimos partidos de Liga y esperar el tropiezo de sus rivales para tener alguna opción de disputar la promoción de ascenso, lo que implica firmar su mejor esprint final en la categoría en más de cuarenta años, porque no gana en las tres últimas jornadas en Segunda desde el curso 1979-80.

Con nueve puntos en juego, el Levante ocupa la undécima plaza con 56 puntos y el Real Oviedo y el Racing de Santander están empatados a 61 puntos en la quinta y sexta posición, respectivamente, por lo que necesita adelantar a cinco equipos y recortar seis puntos.

El Levante, que tiene enfrentarse hasta el final del campeonato al Eldense, Alcorcón y Huesca, no gana en Segunda sus tres últimos partidos de Liga desde la temporada 79-80.

Entonces, en un equipo dirigido desde el banquillo por Pachín y con jugadores como Campuzano, Barrie o Agustín, el Levante cerró ese curso con los triunfos ante el Nàstic de Tarragona, Deportivo de la Coruña y Castilla.

Desde 1980 hasta hoy, el Levante sólo consiguió ganar los tres últimos partidos del campeonato regular en otras dos ocasiones, pero ambas en la ya desaparecida Segunda División B, un escalón por debajo de su división actual.

Fue en la temporada 1984-85 y en la campaña 1988-89, que además coronó con un asenso a Segunda como líder de la categoría al imponerse al Algeciras, Alcoyano y Lorca en esos tres partidos finales.