Los entrenamientos pasan a ser totalmente cerrados, no hay ruedas de prensa ni entrevista personales a los jugadores. El nuevo método de entrenamientos es el habitual en la Liga inglesa y es al que Neville está acostumbrado
VALENCIA. La llegada de Gary Neville al Valencia ha implantado un nuevo estilo a la hora de desarrollar los entrenamientos. El club ha cerrado a cal y canto las sesiones de trabajo del británico, suprimiendo incluso los quince minutos de cortesía iniciales que se ofrecían hasta ahora. Únicamente permanecerán estos minutos en las previas de Liga y UEFA, porque es obligado por normativa, como sucederá este miércoles.
Desde la entidad valencianista apuntan a que es una medida excepcional para aislar lo máximo posible al equipo en el delicado momento que atraviesa, pero lo cierto es que la práctica que ha tomado parte en la ciudad deportiva de Paterna es la habitual en la Premier League, una forma de trabajar a la que está acostumbrado Gary Neville.
El técnico británico ya ironizó en una rueda de prensa al poco de llegar al club de Mestalla sobre la visibilidad de los entrenamientos a puerta cerrada, cuestionado en sala en prensa sobre lo que había sucedido en el terreno de juego –en aquel caso Mustafi se había retirado de la sesión-. “Creía que teníamos una ciudad deportiva más cerrada”, llegó a comentar con su habitual sonrisa.
Las ruedas de prensa es otro aspecto que ha pasado a mejor vida. Ya no existe la rueda de prensa tras entrenamiento de un jugador de la plantilla y, al igual que sucede con los quince minutos de cortesía, únicamente habla el técnico cuando es obligado, en la previa y post de cada partido. Tras la marcha de Mourinho, la Liga obligó por normativa al técnico de cada equipo a hablar ante la prensa antes de cada encuentro.
Pese a que este aspecto se ha llevado a cabo hasta el extremo bajo el mandato de Gary Neville, no ha sido el técnico el impulsor de cerrar los entrenamientos, ya que es algo que lleva haciendo el Valencia desde hace casi una década. La ‘moda’ de cerrar los entrenamientos llegó a Paterna de la mano de Koeman, que incluso alzó un muro para separar el parking, un muro que ahora ha quedado en broma.
Tras la salida de Koeman y la llegada de Unai Emery, este hecho se mantuvo y todavía se amplió ya que fue el técnico de Hondarribia el que instaló todas las lonas que ahora cubren uno de los campos de entrenamiento donde habitualmente trabaja el primer equipo, algo que siguieron aprovechando sus predecesores.
Con Nuno la política de ‘bunkerizar’ Paterna siguió, algo que ha llegado ahora al cierre total con Neville. Pero no es solo el primer equipo el que sufre esta política y es que desde hace ya algún tiempo tampoco se permiten ver los entrenamientos del filial o del juvenil. El ‘modelo Premier’ se ha instalado en Paterna.