El consistorio estudia toda la documentación para no dejar impune "la estafa de Porxinos" entre la que incluyen el proyecto Newcoval que firmaron Manuel Llorente y Rodrigo Rato. Todo apunta a que finalizará en los tribunales
VALENCIA. El nuevo Plan de Actuación Integral que presentó el Valencia CF el pasado 15 de marzo al Ayuntamiento de Ribarroja, para tratar de resolver el problema de Porxinos, no se ajusta a la legalidad necesaria para superar el corte de la Consellería de Territorio y Medio Ambiente según ha podido saber PlazaDeportiva.com por diferentes fuentes contrastadas.
El PAI que ha elaborado el Valencia CF no es excesivamente diferente al primero que fue aprobado inicialmente por el Ayuntamiento, de Francisco Tarazona, y que posteriormente fue anulado por el Tribunal Supremo. Según fuentes conocedoras del informe presentado por el club de Mestalla apenas han variado nada en los temas importantes que hicieron que el anterior plan fuera declarado nulo por la justicia, cuando además la zona sobre la que se pretende obtener una licencia urbanizable ha sido declarada como no urbanizable en el Plan General de Ordenación Urbana del municipio de Ribarroja. El principal cambio está establecido en la disminución de viviendas de 2.700 a 2.400 aproximadamente pero se entiende como algo insuficiente para poder aprobar el PAI.
La resolución de la Consellería tardará bastantes meses y puede que incluso un año, es decir hasta marzo de 2017, en dar una respuesta definitiva sobre el famoso PAI de Porxinos. Si la Consellería decidiera darle luz verde, algo que es totalmente inesperado, sería el Ayuntamiento de Ribarroja el que debería aprobar en última instancia el plan. Sería en el pleno del consistorio donde se votaría y según las fuentes consultadas por esta redacción, el grupo socialista que ahora gobierna en la localidad de Camp de Turia dirá no al Plan de Actuación Integral presentado por el Valencia CF.
El problema de Porxinos comenzó para el club desde el mismo momento en el que se llevó a cabo la operación en el año 2006. Aquél "pelotazo" como lo definió el entonces presidente valencianista, Juan Soler, ha terminado siendo un gran quebradero de cabeza para la entidad que dentro de unos meses se volverá a encontrar con el problema.
El Valencia CF se favoreció de la recalificación de casi dos millones de metros rústicos en urbanizables y los vendió por 80 millones más de los que los había adquirido a la inmobiliaria Nozar. Sin embargo, una demanda del grupo 'Salvem Porxinos' demandando que el PAI había sido ilegal fructificó y el Tribunal Supremo anuló la medida del Ayuntamiento y volvió a darle carácter de suelo rústico a los terrenos dejando a la inmobiliaria sin posibilidad de edificar. De hecho, los terrenos ya no pertenecen a la inmobiliaria, que quebró, sino que los entregó como pago de sus deudas a tres entidades bancarias.
Con estos bancos fue con los que el Valencia CF negoció hace ahora casi dos años para alcanzar un acuerdo que cerraron dándose hasta 2019 para que el club consiguiera la legalización del PAI presentando uno nuevo y sino lo lograba el club estaba obligado a indemnizarlos con una cantidad que ronda los 20 millones de euros. Ese es el escenario que se encontrará el club antes o después porque según aseguran desde fuentes conocedoras de las conversaciones "el Valencia CF no tiene intención de hacer ninguna ciudad deportiva en Ribarroja ni de lograr el PAI, simplemente está cubriéndose de cara a los bancos y ganando tiempo".
RIBARROJA CREE QUE NEWCOVAL FUE UNA ESTAFA
Si para el Valencia CF la operación de 'Porxinos' se ha terminado convirtiendo en una pesadilla, a la que le sacaron unos beneficios de 80 millones de euros, para el ayuntamiento de Ribarroja que cobró 20 millones por la operación no ha sido menos.
La localidad lleva diez años esperando la Ciudad Deportiva que se les prometió y ya sabe de primera mano que el primer equipo nunca irá allí a entrenarse como se le prometió, porque eso fue lo que transmitieron Luis Cervera y Kim Huat Koh al alcalde de Ribarroja, Robert Raga, hace unas semanas.
El Valencia CF si todo sigue su cauce y no le aprueban el PAI deberá buscar una solución con los bancos y puede llegar a reclamarle al Ayuntamiento los 20 millones de euros que en su día le pagó. Sin embargo, desde el consistorio aseguran que pelearán para no devolver ni un céntimo por dos motivos.
En primer lugar porque por contrato el Valencia CF sólo abonó 5,5 millones de euros por patrimonio al Ayuntamiento y los otros 15 fueron como donación y por tanto asegura el alcalde Raga que "nunca deberían devolver ese dinero". En segundo lugar en el Ayuntamiento aseguran haber creado una comisión de investigación que está estudiando al detalle toda la operación Porxinos para que la "estafa no quede impune" afirma categóricamente el alcalde de la localidad.
Roberto Raga está convencido de que su pueblo ha sido estafado con esta operación y principalmente con la operación Newcoval. Manuel Llorente firmó como presidente del Valencia CF el 21 de diciembre de 2011 la operación 'Newcoval' en la que además de otros hitos inmobiliarios se comprometía a construir la ciudad deportiva del Valencia CF en la localidad de Náquera.
El consistorio dispone del contrato firmado entre el club y Newcoval y con ello pretender demostrar que el club estafó a Ribarroja al comprometerse a llevar la Ciudad Deportiva del primer equipo que ya tenían comprometida con ellos por contrato a otra localidad, en este caso Náquera. Este será uno de los principales argumentos de defensa si algún día el Valencia CF le solicita la devolución de los 20 millones.
El culebrón 'Porxinos' pareció zanjado en diciembre de 2014 cuando el club firmó con los bancos el acuerdo de no agresión por un periodo de cinco años. Sin embargo, el problema volverá a plantearse en el momento en el que bien la Consellería o bien el Ayuntamiento de Ribarroja tumben el nuevo PAI. Ese día, es posible que comiencen los problemas judiciales entre las partes y más probable todavía que los naranjos de Porxinos sobrevivan para siempre o al menos nunca mueran por la famosa construcción que en su día prometió Juan Soler.
· DOCUMENTOS QUE PRUEBAN LA CD DE NÁQUERA
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