VALÈNCIA. El Valencia Basket, tras proclamarse el viernes por la noche campeón de la Supercopa de Europa, visitará este domingo al Campus Promete en la sexta jornada de la Liga Femenina con la esperanza de la que resaca del titulo y de las celebraciones no le impidan sumar una nueva victoria y seguir invicto en la competición.
El equipo de Rubén Burgos se impuso, con una extraordinaria actuación en defensa y en ataque, al poderoso UMMC Ekaterimburgo y tras conquistar el que fue el tercer título de su historia y el primero delante de su público se lanzó a celebrarlo, sin olvidar el desplazamiento que debe realizar hoy a Logroño para esta nueva cita.
Pero más allá del cansancio, la confianza de haber tumbado al mejor equipo de Europa y de haberlo hecho no sólo desde una aguerrida e inteligente defensa, una de las señas de identidad del equipo, sino también desde un ataque bien leído e inspirado debe hacer crecer al equipo.
Rubén Burgos tendrá la baja para este partido de Cristina Ouviña. La jugadora sufrió un golpe durante el partido de anoche, que le produjo un esguince en el codo derecho. No ha viajado con el equipo y será baja para el partido de mañana. Ouviña se ha quedado en Valencia donde se le realizarán pruebas para conocer el alcance de la lesión.
El Valencia, ha ganado los cuatro encuentros que ha disputado hasta ahora en la competición doméstica mientras que el Campus Promete, que ha jugado uno más, mantiene un buen balance de tres triunfos y dos derrotas que le ha encaramado a la zona de playoff.
Comandado por Aina Ayuso, que este verano fue elegida en el draft de la WNBA junto a Raquel Carrera, el equipo riojano tiene en la también exterior Paulas Estebas y en la interior Serena-Lynn Geldof a sus otros dos puntales en este buen inicio que le ha llevado, entre otros triunfos, a ganar al potente Star Girona, algo que debe poner en alerta al Valencia.