VALÈNCIA. El Valencia Basket ha volado a Bilbao directo desde Moscú, después de caer ayer en la pista del CSKA Moscú (94-67) en partido de la Euroliga en el que sufrió la lesión de Sam Van Rossom, que es duda para el encuentro de Liga del domingo en la cancha del RETAbet Bilbao Basket.
Tras hacer noche en Rusia, la expedición del conjunto valenciano ha salido esta mañana en un vuelo chárter desde uno de los aeropuertos de la capital moscovita con rumbo al País Vasco, donde está previsto que aterrice a mediodía.
Según el plan previsto, el equipo de Txus Vidorreta, técnico de los valencianos, hará un entrenamiento esta misma tarde en Bilbao y volverá a ejercitarse el sábado a mediodía para preparar este encuentro de la octava jornada de la Liga Endesa.
La idea es que Van Rossom trabaje estos días con el fisioterapeuta para tratar el esguince en el tobillo derecho que sufrió en la segunda parte del duelo en Rusia, cuando los moscovitas ya se habían distanciado en el marcador.
Con el francés Antoine Diot aún de baja y la reciente lesión de Van Rossom, Vidorreta sólo tiene a un base asegurado para el choque del domingo, el catalán Guillem Vives, a pesar el alero gallego Alberto Abalde ejerció durante un tramo de partido frente al CSKA de improvisado director de juego.