Los arquitectos Mark Fenwick y Cristian Schneider mantienen la primera toma de contacto con el consistorio para explicar las modificaciones llevadas a cabo en el proyecto del futuro estadio
VALENCIA. El Valencia CF sigue dando pasos para reanudar las obras del Nuevo Mestalla, eso sí, los pasos son muy cortos y se avanza de manera muy lenta, sin todavía explicar cómo y cuándo se reanudarán las obras. El club de Mestalla está resolviendo los trámites burocráticos necesarios para poder finalizar el estadio en el plazo que marca la ATE.
Así pues, tras la reunión mantenida entre Anil Murthy y Joan Ribó el pasado 29 de septiembre donde el presidente del Valencia CF le transmitió al alcalde la intención de renovar la licencia de obra y presentar al público el diseño elegido para el nuevo estadio valencianista, este miércoles llegó el turno de explicar a los técnicos del Ayuntamiento las modificaciones en la obra inicial.
Las cabezas visibles que acudieron en nombre del Valencia CF fueron el arquitecto Mark Fenwick, encargado del proyecto, junto al también arquitecto del club de Mestalla, Cristian Schneider, que fueron los encargados de exponer en el consistorio las líneas maestras del nuevo proyecto presentado la pasada semana.
La primera gran modificación, que fue donde se basó gran parte de la reunión, vino en la reducción del aforo que el club quiere llevar a cabo. El estadio se proyectó para 71.000 espectadores y el club pidió la licencia para un máximo de 65.000 aficionados. Pese a que la idea de la entidad es hacer un estadio que ronde los 55.000 se han querido dejar la puerta abierta a un futuro aumento de grada.
Esta reducción del aforo se llevará a cabo en el tercer anillo, el más grande de todos y el que permite más modificaciones. Según explicaron los arquitectos en el Ayuntamiento aumentarán la distancia entre los asientos dentro de este anillo superior, lo que permitirá reducir alrededor de entre cinco y seis mil localidades y además se eliminarán las últimas filas de la grada más elevada para construir un plataforma transitable que también podrá albergar publicidad, lo que completará la reducción de aforo sin necesidad de derribar nada de la estructura actual.
Además de la reducción del aforo, la otra gran remodelación que interesaba al Ayuntamiento se encuentra en los accesos y salidas de emergencia. Al cambiar por completo las fachadas estos han cambiado radicalmente y desde el club explicaron al consistorio que construirán torres verticales con escaleras de caracol pegadas a la fachada para evacuar las partes más altas del estadio.
Por último, dentro de la licencia requerida por la entidad también se encuentra la reducción de las plazas de parking que contará con alrededor de 500 plazas, menos de las 3500 proyectadas inicialmente pero más de las estipuladas por Amadeo Salvo en la primera gran remodelación del proyecto para el nuevo Mestalla.
Así pues ahora es el turno del Ayuntamiento que deberá seguir trabajando con la comisión creada por el Valencia CF para analizar con detalle todas las modificaciones del proyecto y si se ajusta a la normativa vigente para terminar concediendo la licencia de obra definitiva, un paso necesario para la reanudación de las obras.
LUIS CERVERA, EL GRAN AUSENTE
Uno de los grandes ausentes de la reunión celebrada en el Ayuntamiento este miércoles fue Luis Cervera. El hasta este miércoles director de operaciones del club fue despedido en la misma mañana de este día once y dejó su cargo de inmediato con lo que no acudió a la cita por el Nuevo Mestalla, algo que había sido su cometido en los últimos años así como la situación de Porxinos.