VALÈNCIA. El Valencia, que perdió este domingo por 1-3 ante el Girona, acumula cinco encuentros consecutivos sin vencer en su estadio y ha cerrado su participación en Mestalla este curso con la peor racha de partidos sin ganar como local desde la campaña 2020-21.
El equipo de Rubén Baraja ha perdido tres de los últimos cinco partidos que ha disputado desde mediados de marzo como local y ha empatado los otros dos, un bajón de resultados que le ha impedido en parte alcanzar la séptima plaza y con ella poder regresar a Europa.
Así, desde que el pasado nueve de marzo el Valencia consiguiera su última victoria en Mestalla en el partido que acabó 1-0 ante el Getafe con tanto de Hugo Duro, el equipo de Baraja ha empatado con el Mallorca, perdido con Betis y Alavés en dos encuentros clave para pugnar por la séptima posición, empatado a cero con el Rayo Vallecano y perdido este pasado domingo ante el Girona.
La última vez que el Valencia se quedó cinco encuentros seguidos sin ganar en Mestalla fue en la campaña 2020-21, cuando entre noviembre de 2020 y enero de 2021 cosechó tres empates y dos derrotas en un estadio totalmente vacío por la pandemia.
Entonces, el equipo que entrenaba Javi Gracia perdió ante el Atlético de Madrid y el Sevilla, mientras que empató ante el Athletic Club, el Cádiz y el Osasuna en una campaña en la que los partidos se disputaban a puerta cerrada por la situación del coronavirus.
En estos últimos cinco encuentros en los que el Valencia no ha conseguido la victoria, el equipo valenciano apenas apenas ha conseguido marcar dos goles, una cifra tan baja que sólo se había dado en una ocasión en los últimos cuarenta años y fue entre la jornada 20 y 30 de la temporada 1985-86, en la que el Valencia acabó descendiendo a Segunda División por primera y única vez en su historia.
Además, los tres goles que le endosó el Girona suponen el máximo de un rival en Mestalla en la Liga desde el pasado 11 de mayo de 2022 cuando el Betis se impuso por 0-3 en Mestalla.
En aquella ocasión marcaron William José, Canales y Borja Iglesias, en una circunstancia muy similar ya que también fue en el tramo final de la temporada, jornada 36, y con José Bordalás, actual preparador del Getafe, en el banquillo valencianista.
Desde entonces, el equipo había disputado un total de 38 encuentros en los que, como mucho, había recibido dos tantos como le ha ocurrido en la presente campaña ante Osasuna (1-2), Real Madrid (2-2) o Betis (1-2).