VALÈNCIA. El Valencia mantiene su límite de coste de plantilla hasta los 85,5 millones de euros. En el último año, el Valencia ha incrementado en casi seis millones respecto a los 79,9 millones cifrados el pasado mes de febrero.
Con esta cifra, el Valencia es el noveno club con el límite de coste de plantilla más alto de la competición. Un límite que el propio Peter Lim no ha querido alcanzar y el gasto de la plantilla de Baraja es cerca de diez millones inferior en busca de una "sostenibilidad" según explicó el director deportivo Miguel Ángel Corona.
LaLiga ha hecho público este jueves el Límite de Coste de Plantilla Deportiva (LCPD) de los clubes de la Primera y Segunda División tras el cierre del mercado de verano. Se trata del conocido límite salarial que hace referencia a la cantidad que cada club puede gastar como máximo en su plantilla en función de sus ingresos y sus gastos.
El límite salarial o, lo que es lo mismo, el límite de coste de plantilla deportiva registra y detalla la cantidad máxima que cada club de Primera y Segunda División pueden gastar en los sueldos destinados a su primera plantilla (plantilla inscribible). Este concepto agrupa los salarios de cuerpo técnico (entrenador, segundo entrenador y preparador físico) y los sueldos de los jugadores. También se refiere al filial, a la cantera y a las demás secciones del club, caso que las hubiese (plantilla no inscribible).
Bajo el concepto de plantilla deportiva inscribible y no inscribible se asocian los honorarios fijos así como los variables tanto en pago en dinero como en especie, por ejemplo el pago de una vivienda o un vehículo, a cargo del club. También entran aquí los pagos por cesiones de los derechos de imagen, las primas de plantilla por objetivos, la amortización de los fichajes, las cuotas de Seguridad Social, las primas a los representantes e intermediarios o las indemnizaciones por la rescisión de los contratos.
El límite salarial que controla salarialmente a los clubes se efectúa calculando la diferencia entre los ingresos, mediante derechos de televisión, patrocinadores o venta de entradas, de los gastos estructurales y el repago de la deuda prevista a lo largo de la temporada. Con este calculo cada entidad determina su límite salarial. LaLiga, en todo caso, obliga a acogerse a los clubes a su control económico, ya que si un club define un límite de coste de plantilla peligroso para sus finanzas este organismo lo puede modificar. Los clubes no tienen por qué consumir el límite en su totalidad.