VALÈNCIA. El Valencia Basket recibe este jueves al Barça en la jornada 28 de la fase regular de la Fonteta obligado a ganar para esquivar la posibilidad de caer fuera de los puestos de ‘play-in’, aquellos que dan derecho a disputar el cruce de acceso para los cuartos de final de la Euroliga.
El equipo valenciano ocupa actualmente la décima posición, la última de las cuatro que dan derecho a jugar ese cruce, pero tiene un balance de trece victorias, que es el mismo que el Partizan, que es undécimo, y un triunfo más que el Bayern de Múnich, que es duodécimo.
Por arriba, el Valencia tiene ‘a tiro’ al Baskonia y al Maccabi Tel Aviv, ambos con catorce victorias cada uno. El Barcelona ocupa una cómoda segunda plaza con dieciocho victorias aunque con un colchón de dos sobre el séptimo que hace que aún no tenga claro poder pasar directo a los cuartos de final.
Cuando pase este partido, solo quedarán otros seis para acabar la fase regular por lo que el margen cada vez es más pequeño. En el club de la Fonteta hay confianza en que el perfil físico de la plantilla que se ha construido permita al equipo afrontar con garantías este decisivo tramo final, en el que por ejemplo la pasada campaña bajó mucho su rendimiento.
El Valencia, que el domingo se impuso al Zunder Palencia en la Liga Endesa, llegada a esta cita tras haber acumulado dos derrotas seguidas en la competición, la primera en la Fonteta ante el Olympiacos y la segunda en la pista del Virtus Bolonia la semana pasada.
El equipo que dirige Álex Mumbrú fue capaz de imponerse hace apenas un mes en la pista del Barcelona por un apretado 76-79 en la Liga Endesa. Además, en octubre también fue capaz de imponerse en la Fonteta también en la acb igualmente por tres puntos 71-68. En cambio, en la Euroliga cayó en el Palau por 74-70.
Para este encuentro, el técnico mantendrá la baja de Boubacar Touré, que lo es desde hace un par de meses por problemas en la espalda y deberá hacer dos descartes técnicos más de los catorce jugadores que tiene actualmente disponibles.
Mumbrú espera que la mejora en el rendimiento del base canadiense Kevin Pangos mejore la fluidez ofensiva del equipo, una situación que ya se vio el domingo con los 111 puntos ante el Palencia pero existe el riesgo de que la defensa, que hace meses dio al Valencia su mejor momento de la temporada, se resienta aún más y no compense.