VALÈNCIA. La Euroliga regresa este viernes a la Fonteta. El Valencia Basket se medirá al poderoso CSKA de Moscú, vigente campeón del torneo, con el objetivo de acabar la fase regular entre los ocho primeros de los dieciocho contendientes que disputan este año la competición.
Los cambios en el acceso a la máxima competición del baloncesto europeo han obligado al Valencia a variar el enfoque de sus últimas campañas, en las que tenía en la ACB una puerta de acceso a la Euroliga que ahora se ha cerrado.
En el seno del club valenciano son conscientes de la gran dificultad que entraña llegar a disputar las eliminatorias por el título, por lo que la idea inicial es acercarse al tramo final de esta nueva y larga fase regular de 34 jornadas con opciones de hacerlo.
El Valencia afronta este encuentro tras haber sufrido una merecida derrota en la pista del RETAbet Bilbao Basket, en un encuentro en el que su floja defensa durante la primera parte obligó a nadar a contracorriente durante toda la segunda en la que las opciones que tuvo al final no fueron suficientes para completar la remontada.
Pero antes de ese encuentro, el equipo de Jaume Ponsarnau había completado dos sólidos partidos. El primer en la Supercopa ante el Barcelona, en el que cayó con buena imagen, y el segundo en la ACB ante un Andorra al que arrolló.
Enfrente tendrá ahora a uno de los equipos más potentes del continente y claro candidato a estar en la Final a cuatro a pesar de que este verano hayan dejado el equipo algunas de las piezas clave de su rotación como Sergio Rodríguez, Nando de Colo, Cory Higgins o Otello Hunter.
El técnico griego, Dimitris Iotudis, mantiene como estrella a Will Clyburn y ha reforzado la línea exterior con Mike James, el joven Ron Baker, el maduro Janis Strelnieks y Darren Hilliard. En la pintura han llegado Johannes Voigtman y Kostas Koufos.
Tras recuperar a Maurice Ndour y a Jordan Loyd, baja por lesión en el último choque, Jaume Ponsarnau contará con los catorce jugadores que componen su plantilla, por lo que tendrá que hacer dos descartes técnicos.