El valencianismo llega a 2016 con la ilusión de volver a ser campeón 

30/12/2015 - 

VALENCIA. El Valencia CF despedirá este 2015 con un partido en el Madrigal ante el Villarreal en el que buscará reconciliarse con la victoria en Liga y recuperar terreno respecto al gran objetivo de la temporada, obtener una plaza entre los cuatro primeros de la liga española. 

Sin embargo, este 2015 será despedido otra vez y ya van siete consecutivos sin celebrar ningún título. El 16 de abril de 2008 Marchena y Baraja levantaron al cielo de Madrid el último trofeo que entró en las vitrinas valencianistas, la Copa del Rey que se le ganó al Getafe con los goles de Mata, Alexis y Morientes. 

Gary Neville se hizo cargo a mediados de diciembre de un equipo roto físicamente, perdido tácticamente y hundido de cabeza. Todo eso se ha traducido en unos resultados tan pobres en este primer tramo de temporada que tienen al club noveno a nueve puntos de los puestos de Champions League.

Durante este mes de enero el inglés y su plantilla tendrán la complicada tarea de alternar la Liga y la Copa del Rey. La competición del KO es la última que ganó el club tiene este año un formato nuevo por el que los equipos irán conociendo a sus rivales eliminatoria a eliminatoria. Con la caída del Real Madrid por su alineación indebida en Cádiz queda fuera uno de los dos grande cocos del torneo. Sin embargo, quedan en liza Barcelona y Atlético de Madrid que son los dos últimos campeones de Liga y los dos primeros de la competición regular. El año pasado se tiró la Copa en Cornellá ante el Espanyol y fue uno de las grandes desilusiones para el aficionado.

En febrero llegará Europa. La segunda competición internacional a la que ha quedado condenado el equipo de Mestalla tras su pobre fase de grupos en la Champions que le costó la eliminación de la máxima competición europea. En 2004 la entidad valencianista logró la antigua y ya extinguida Copa de la UEFA en Gotteborg, Suecia, derrotando en la final al Marsella con los goles de Mista y Vicente. Desde aquel día los valencianistas no han vuelto a tocar una final, sin tener en cuenta la que jugaron de la Supercopa de Europa tras ganar la UEFA, que se le ganó al Porto 2-1.

Ocho años, siete temporadas, sin ganar un título. Doce años, once temporadas, sin ganar un título europeo. Empiezan a ser etapas muy largas para un club que a principios de siglo pareció haber encontrado el camino del éxito y haber dejado atrás las complicadas y ausentes de titulos decadas de los ochenta y noventa (excepto la copa de Sevila). Los valencianistas confiaron en gran parte en el señor Lim y en su proyecto porque principalmente su apuesta era la de convertir al club en un equipo ganador.

Meriton apostó muy fuerte por el fútbol. Su propuesta era la de volver a colocar al Valencia CF en lo más alto y conseguir ampliar lo máximo posible el palmarés valencianista. Eso gustó a una afición que llevaba años de sinsabores y que veía como su equipo se alejaba cada vez más de la élite europea. Con la llegada de Lim eso cambió y el club volvió a competir e ilusionar a su gente. Hoy, después de un inicio de Liga muy complicado el valencianista quiere volver a ganar un título. Lo desea, lo sueña, lo necesita. Ese debe ser el gran objetivo de Neville y los suyos.