CASTELLÓ. El CD Castellón empató en Castalia a un gol ante el Real Unión de Irún, en un partido en el que mostró a la parroquia albinegra de qué es capaz, en la primera mitad, y el juego anodino y previsible, en la segunda. Aún y con eso, la fortuna se alió hoy con los vascos que tuvieron una efectividad máxima y que vieron como el conjunto castellonense se estrellaba en los palos de su portería en el primer acto.
De entrada, Rudé cumplió lo adelantado en la víspera del partido y demostró con el once elegido de inicio que, ahora mismo, es preceptivo descargar de minutos a aquellos jugadores con más participaciones ligueras.
Así, Sarr regresó a la portería. Iago Indias volvió a ser pareja de Borja en la zaga y, lo más relevante, un centro del campo experimental, a tenor de la participación de los protagonistas, hasta el momento. Carles, Kochorashvilli y Pablo Hernández de mediapunta con Jeremi y Koné para percutir por fuera y surtir de balones a un ‘fijo’ como De Miguel.
El cambio fue espectacular. El equipo se hizo dueño rápidamente del control del partido y fue un vendaval constante. Un equipo que jugó a dos toques en muchos momentos, que fue vertical y que fue indescifrable para su rival debido a la gran movilidad de todos los jugadores en campo contrario.
Las ocasiones se sucedieron y sólo faltó el gol en el primer tiempo, porque ocasiones claras hubieron de sobra.
La primera un remate a quemarropa de Kochorashvilli. Un cabezazo al travesaño de De Miguel, otro de Jeremi y el tercero de Koné, además de infinitas llegadas al área de peligro de Irazusta. El Castellón circulaba rápido, progresaba y era vertical con jugadores con mucha movilidad como Jeremi, Koné, Pablo o Kocho que desbordaban una y otra vez a los vascos. El primer acto fue ilusionante, perfecto y sólo tuvo un pero: no llegó la justica al marcador.
Con la reanudación llegaron los cambios y, al a vista está, el juego del equipo decreció para volver a ese fútbol lento, acumulando toques con poca profundidad y reducido a la explosividad de Koné para generar situaciones de gol.
Cristian entró por Manu Sánchez y Carles pasó a ser lateral. El equipo perdió profundidad por ese carril y claridad en la salida de pelota. Con el paso de los minutos el Castellón intentó adelantarse y lo consiguió en una acción con centro al área que devolvió Iago Indias a la zona del 9 y ahí De Miguel demostró ser un delantero de nivel y adelantó a los locales. Pensamos que ese tanto sería definitivo, pero tras sacar de centro el Real Unión se desplegó, ganó la banda derecha por medio de Aramburu que soltó un latigazo que se coló por toda la escuadra. Empate y volver a empezar, pero esta vez faltaron ideas y piernas. Se habían marchado ya del campo Yeremi y Pablo Hernández y en la recta final lo haría Koné. En definitiva, el Castellón fue otro, el de las últimas semanas, el que acaba desesperando al aficionado. El Real Unión tuvo la última ocasión y se fue de Castalia con un empate. Difícil de asumir, viendo el vendaval de la primera parte. Creible viendo la segunda. Conclusiones muy evidentes para todos.
CD Castellón: Sarr, Manu Sánchez (Cristian 45’), Iago Indias, Borja Granero, Salva Ruiz; Carles, Kochorashvilli, Yeremi (Fabricio 59’), Koné (Fuentes 83’), Pablo Hernández (Suero 59’) y De Miguel (Cubillas 77’).
Real Unión: Irazusta; Aramburu, Iván Pérez, Montoro, Parada; Beobide, Rivero (Espigares 84’), Carlos Bravo, Oyarzun (Santos 75’), Luque (Azcue 75’)y Nacho Sánchez (Giorgi 65’).
Goles :
1-0 min. 63. De Miguel
1-1 min 64. Aramburu
Árbitro: López Jiménez (Comité Catalán). Mostró tarjeta amarilla a Koné y Carles (CD Castellón) y a Parada y Luque (Real Unión).
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 37 del grupo 2 de Primera Federación disputado en Castalia con presencia de 8.600 espectadores.