CASTELLÓ. El Castellón presentará su campaña de abonados con algo de retraso respecto a su intención inicial de hacerlo en la primera semana de julio. Las reubicaciones que obliga LaLiga debido a las necesidades que tienen que ver con las retransmisiones televisivas y la fusión de las gradas de animación en una sola motivan esta demora.
Así las cosas, el club de la Plana prevé la puesta a la venta de sus carnets no antes del 15 de julio. Para entonces se habrá cumplido el plazo fijado por el club para darse de alta en la grada de animación unificada, situada en Gol Sur Bajo. Además, la entidad albinegra tendrá claras las necesidades de espacio de LaLiga para las cámaras de televisión y de videoarbitraje, por lo que sabrá la cantidad exacta de abonos que podrá vender.
La demanda de carnets será alta y posiblemente no pueda cubrirse al completo tal como ocurrió la pasada temporada, cuando más de mil personas quedaron en lista de espera. Este año la cifra podría ser incluso mayor después del ascenso a Segunda.
El Castellón está buscando fórmulas para optimizar al máximo las posibilidades de espacio que ofrece Castalia con el fin de acoger al mayor número de gente posible en la vuelta de los orelluts al fútbol profesional. De momento ya se han reducido los pases para patrocinadores y colaboradores. Pero esta medida solo permitirá que el tope de abonados sea similar a los 13.183 de la pasada temporada. Y es que el estadio también perderá asientos debido a la instalación de las nuevas cámaras.