VALÈNCIA. Este viernes se cumplen cuatro meses desde que se consumó el cambio de propiedad en el Elche CF sin que la entidad ilicitana haya notado cambios significativos en el funcionamiento del club, dirigido ahora por el argentino Christian Bragarnik.
El pasado 3 de diciembre, el agente futbolístico sudamericano adquiría, en una notaría de Elche, el 70% de los valores de la sociedad deportiva que pertenecían a José Sepulcre, quien había sido el máximo accionista individual de la entidad durante casi una década.
La llegada de Bragarnik y de su equipo de colaboradores abrió todo tipo de especulaciones sobre el cambio en el modelo de gestión deportivo y económico en la entidad, pero la realidad es que el Elche no ha sufrido modificaciones significativas.
El argentino, que desde la compra del club no ha comparecido ante los medios para presentar su proyecto, solo adelantó a la salida de la notaría que su objetivo era “mantener el rumbo y seguir por el buen camino” marcado por Sepulcre.
El único movimiento del empresario argentino, además de ampliar su control accionarial hasta el 99% tras suscribir una ampliación de capital, fue situar en el consejo a tres personas de su confianza, los abogados españoles Alejandro Martínez Montero y Julio César Giner Gómez, y el empresario argentino y amigo personal Omar Floro.
Bragarnik, en un gesto continuista, mantuvo en la presidencia a Joaquín Buitrago, hombre de confianza de Sepulcre, a pesar de que él mismo había pronosticado, tras la venta de la entidad, que su salida del consejo era inminente.
También Patricia Rodríguez, directora general, y Nico Rodríguez, director deportivo, principales apuestas del anterior máximo accionista, continúan al frente de sus respectivas parcelas y con plenos poderes a pesar del cambio de propiedad.
Ni siquiera en la parcela deportiva, negocio habitual de Bragarnik, se apreció la mano del argentino, ya que en el mercado de invierno no llegaron al club jugadores de su empresa de representación y una de las bajas fue, precisamente, Danilo Ortiz, futbolista que había recomendado antes de su llegada.
Uno de los primeros gestos del argentino fue respaldar de forma rotunda al entrenador, José Rojo ‘Pacheta’, ídolo de la afición, tras los rumores que situaban a Diego Armando Maradona, uno de los técnicos de su cartera, en la órbita del equipo ilicitano.
Fuentes del club han asegurado a Efe que el nuevo propietario del Elche no desea “tocar el actual modelo” ante el buen momento deportivo y social que atraviesa la entidad y que los cambios de gestión se llevarán a cabo una vez acabe la temporada y de forma progresiva.