El Hércules rompe con la tradición y florece en el mes de enero

ALICANTE (EFE). El Hércules, octavo clasificado del grupo 3de Segunda Federación, ha cerrado su participación en enero con 10 puntos de los 12 posibles y remontando posiciones en la clasificación, rompiendo de esta forma la tradición negativa que perseguía al equipo en cada primer mes del año.

Durante enero, el Hércules, que llegó a estar a 10 puntos de la zona de promoción y más cerca del descenso que de la cabeza, ha sumado tres victorias, dos de ellas remontando en el descuento ante Saguntino (2-3) e Ibiza Islas Pitiusas (2-1) y otra ante el Badalona (0-1), y ha empatado un partido ante el Mallorca B (2-2).

Los resultados obtenidos durante este temido mes han permitido al equipo que dirige Lolo Escobar, a pesar de las lesiones, sanciones y movimientos en el vestuario provocados por el mercado de fichajes, reengancharse a la pelea por el ascenso, ya que se ha situado a solo dos puntos de la zona de promoción.

El primer mes del año se convirtió en los últimos lustros en una pesadilla para el club, ya que el rendimiento deportivo del equipo siempre caía en picado, complicando sobremanera sus objetivos y minando la estabilidad y credibilidad de los proyectos.

Desde el club se justificó esta tendencia argumentando una bajada de tensión de los respectivos equipos y cuerpos técnicos tras un periodo de vacaciones y a un exceso de confianza a la espera de la fase decisiva del curso, pero desde los vestuarios siempre se apuntó como posibles causas la inestabilidad que genera el mercado de fichajes y la presión y ansiedad del entorno por ver al equipo siempre arriba.

Varios entrenadores, como José Rojo ‘Pacheta’, David Cubillo y Manolo Herrero, tras un buen inicio de curso, cayeron en enero, mientras que otros como Claudio Barragán, Vicente Mir o Luis García Tenevet lo harían días después de acabado el mes como consecuencia de la crisis deportiva arrastrada en el primer mes del año.

Ni siquiera en su mejor proyecto en Segunda B tras el último descenso del fútbol profesional, en el que el Hércules fue subcampeón del grupo con Lluís Planagumá en su banquillo (temporada 2018/19), el equipo se libró de los resultados negativos en enero, si bien pudo corregir posteriormente el rumbo y pelear hasta el final por el objetivo.

También el pasado año, y tras lograr el campeonato de invierno y un récord de triunfos, el Hércules encalló de nuevo a mitad de enero y ya no levantó cabeza en toda la temporada, en la que se le escapó de nuevo el ascenso.