ALICANTE. El José Rico Pérez de Alicante, estadio vinculado y unido históricamente al Hércules, cumple este 3 de agosto 50 años desde su inauguración lejos de sus mejores días tras haber sido sede en el pasado de grandes acontecimientos deportivos, como un Mundial de fútbol o haber sido escenario durante 12 temporadas de partidos de Primera División.
El recinto deportivo, que tiene una capacidad para 28.000 espectadores, aunque llegó a tener un aforo superior a los 30.000, fue inaugurado en 1974 con un partido entre el Hércules y el FC Barcelona que lideraba Johan Cruyff. El equipo catalán se impuso por 0-4 con goles de Rexach, Asensi, Cruyff y Pérez.
El estadio fue construido bajo la presidencia de José Rico Pérez, del que heredó el nombre, para sustituir al estadio de La Viña, que ya se había quedado pequeño y obsoleto para la afición herculana y las aspiraciones de un club que, tras décadas de vaivenes, quería soñar a lo grande.
La inauguración del estadio, obra del arquitecto Andrés Muñoz Llorens, coincidió con la edad dorada del equipo alicantino, que permaneció ocho temporadas seguidas en Primera, acariciando incluso a mediados de los 70 la competición europea.
El momento cumbre del estadio llegó en 1982, cuando fue una de las sedes del Mundial de España.
El Rico Pérez fue seleccionado por la entonces campeona del Mundo, Argentina, como sede de sus partidos de la fase de grupos y, además, acogió el encuentro por el tercer y cuarto puesto entre Polonia y Francia.
La remodelación y ampliación del Rico Pérez para adaptarse a las exigencias del Mundial, con la construcción de una nueva tribuna alta, provocó una gran deuda económica y marcó el final de la era dorada del equipo.
La titularidad del estadio herculano del Rico Pérez está actualmente en manos de la Generalitat Valenciana, aunque desde su inauguración ha pasado por varios propietarios.
A principios de los 90, el Hércules vendió la instalación al Ayuntamiento de Alicante para saldar su deuda histórica.
Aligestión, empresa propiedad del máximo accionista del Hércules, Enrique Ortiz, lo compró en 2007, pero el campo salió a subasta en 2017, como consecuencia del impago por parte de la Fundación del Hércules de un préstamo de concedido por la CAM en 2010 que el IVF avaló, y fue adquirido por la Generalitat.
El Rico Pérez también fue escenario, durante su etapa municipal, de los partidos del Alicante CF, ya desaparecido, durante cuatro temporadas, e incluso fue utilizado por equipos como Real Madrid y Mallorca para jugar partidos oficiales por la clausura de su campo.
Por el Rico Pérez han pasado las grandes estrellas del fútbol mundial, como Maradona, que marcó sus primeros goles en una Copa del Mundo en Alicante, Leo Messi o Cristiano Ronaldo.
El recinto deportivo alicantino también ha sido escenario de partidos de la selección española absoluta, sub 21 y olímpica. La selección absoluta ha disputado nueve partidos en el Rico Pérez, en los que no conoce la derrota.
El feudo alicantino ha acogido partidos de tres vigentes campeonas del Mundo (Argentina y España en hombres y Estados Unidos en mujeres) y sobre su césped se selló la clasificación directa para el Mundial de Rusia tras un triunfo ante Albania (3-0).
También fue escenario, en 2019, de dos partidos internacionales de la selección de Chile ante Colombia y Guinea.
El estadio, que sufrió un lavado de cara en 2010 tras el último ascenso a Primera del Hércules, cumple medio siglo de vida lejos de sus mejores días a nivel estético, ya que sus accesos se han quedado obsoletos y los exteriores y gran parte de su interior evidencia falta de seguridad y una notable decadencia.
La próxima temporada, el estadio estrenará una categoría en la que, hasta la fecha, nunca antes había competido, la Primera Federación, lo que obligará a un lavado de cara y a la mejora de algunas de sus infraestructuras.
El estadio, unido inevitablemente al destino del Hércules, celebra su primer medio siglo de vida con un amistoso ante el Deportivo Alavés, conjunto de Primera, con la aspiración de volver a acoger a medio plazo partidos de la máxima categoría del fútbol español, objetivo para el que fue construido.