VILA-REAL. El Villarreal tiró de oficio y de su futbolista más en forma, José Luis Morales, para obtener un valioso punto en un siempre difícil Ramón Sánchez-Pizjuán. Sin embargo, rozó el triunfo con un tanto de Ben Brereton en el último minuto que, cuando ya parecía subir al marcador, fue anulado por falta previa del anglochileno sobre Kike Salas.
Los tres puntos, y más conseguidos de esa épica forma, habrían significado un enorme subidón de euforia en la plantilla y la afición, pero el empate también se valora positivamente después del esfuerzo realizado y las tres victorias de la última semana.
A pesar de vivir un mal momento, el Sevilla ejecutó una muy seria actuación, mereciendo probablemente más la victoria que un Submarino que no tuvo su mejor día en cuanto a producción ofensiva. Los de Marcelino aguantaron el chaparrón en el primer tiempo, en el que Jörgensen y una muy acertada defensa mantuvieron el marcador igualado.
Tras el paso por vestuarios los de Vila-real mejoraron su producción ofensiva, pero vieron como Kike Salas les impedía una vez más dejar la portería a cero. Por fortuna para los de Marcelino, el 'killer' Morales volvió a aparecer sólo dos minutos después para poner en el marcador el 1-1 con el que finalizó el encuentro.
Marcelino es un hombre de ideas claras y fiel amante del sentido común, por lo que en Sevilla continuó con el plan que le venía funcionando. En su dinámico 4-4-2 la única novedad respecto a la jornada anterior fue Santi Comesaña, que entró por Capoue después de su gran actuación en Europa League.
Con esa idea, la puesta en escena del Villarreal en el Pizjuán fue correcta, aunque sin terminar de ser capaz de imponer su plan. Morales pudo correr al espacio y pisar el área de Dmitrović en varias ocasiones, pero eran los hispalenses los que ponían más gente en campo contrario y llegaban con más clarividencia a los metros finales.
El Sevilla se animó con el paso de los minutos, En-Nesyri obligó a intervenir a Jörgensen y el Villarreal no supo voltear la situación. Los de Diego Alonso continuaron apretando, encerrando progresivamente al Submarino y mereciendo marcar antes del descanso.
El oficio de los groguets, culminado con una nueva parada de Jörgensen a En-Nesyri seguido de un bloqueo providencial de Juan Foyth ante su compatriota Lucas Ocampos, sirvió para llegar al medio tiempo con igualdad en el marcador.
La primera jugada del segundo tiempo sirvió para dar un vuelco psicológico a la situación: Pedraza filtró con mucha calidad para Álex Baena y este estuvo muy cerca de anotar. Además, dos minutos después Altimira y Foyth dibujaron una gran jugada por el lado opuesto que también entrañó peligro.
Aunque el Sevilla siguió intimidando periódicamente al conjunto de la Plana Baixa, el escenario fue de más igualdad que en el primer tiempo. Dani Parejo continuó al alto nivel del pasado jueves, Pedraza y Altimira dieron profundidad por las bandas y Gerard, aunque sin aparecer demasiado en cantidad, lo hizo siempre con peligro.
Una de esas veces fue en el minuto 70, cuando se inventó un pase que no existía para que Baena volviera a poner en aprietos a Dmitrović. No obstante, el que primero marcó la diferencia fue un joven recién ingresado en el terreno de juego: Kike Salas ganó el salto a Jorge Cuenca y remató un centro perfecto de Pedrosa a la escuadra de la portería amarilla. Una vez más, el Villarreal fue incapaz de dejar su portería a cero.
Por fortuna para los de Marcelino, la reacción grogueta fue inmediata gracias a su jugador más en forma. Baena y Pedraza cocinaron la jugada por la banda izquierda y, tras un desvío de Gudelj, el Comandante Morales empujó el balón al fondo de la red. Séptimo gol en cuatro partidos del ex del Levante. Más allá de las lesiones de Parejo y Alberto Moreno, no pasó mucho más hasta el último minuto, en el que todo pudo cambiar.
Ben Brereton regateó a Kike Salas y definió de maravilla ante Dmitrović para marcar el gol de la victoria. El equipo amarillo corrió a celebrar por todo lo alto el que habría sido el primer tanto del anglochileno en el Villarreal. Sin embargo, el colegiado vio en la pantalla del VAR una falta de Brereton al defensa hispalense y el tanto, como el triunfo groguet, quedó invalidado.
1- Sevilla: Dmitrović; Juanlu, Nianzou (Kike Salas, min. 72), Gudelj, Acuña (Pedrosa, min. 46); Sow, Fernando (Óliver, min. 90+4), Rakitic; Lukebakio, Ocampos y En-Nesyri.
1- Villarreal: Jörgensen; Foyth, Albiol, Cuenca, Pedraza: Altimira (Alberto Moreno, min. 71) (Ilias Akhomach, min. 84), Parejo (Coquelin, min. 84), Comesaña (Capoue, min. 71), Baena; Morales (Ben Brereton, min. 88) y Gerard.
Goles: 1-0, min. 75: Kike Salas. 1-1, min. 77: Morales.
Árbitro: Isidro Díaz de Mera Escuderos (Comité castellanomanchego). Amonestó a Sow, Juanlu y Rakitic por el Sevilla y a Pedraza y Altimira por el Villarreal.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 15 de La Liga Santander disputado en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán ante 33.898 espectadores.