VILA-REAL. Sólo el Real Madrid había ganado esta temporada en Montilivi. El verbo está conjugado en pasado porque en la noche de martes el Villarreal se unió al campeón de Liga gracias a una meritoria victoria en Girona con un solitario gol de Bertrand Traoré. El Submarino supo contrarrestar las muchas virtudes del Girona y mantener la portería a cero para conseguir tres puntos que le mantienen vivo unos días más en la pelea por la séptima plaza.
Es cierto que sigue siendo muy complicado, pero el triunfo deja al Villarreal a tres puntos de la Real Sociedad y las matemáticas todavía le permiten soñar. En cualquier caso, el partido es una nueva demostración de que el equipo se encuentra en un gran momento y de que la próxima temporada, con Marcelino comandando el Submarino desde el principio, promete ser más exitosa que la actual.
En el inicio el Villarreal jugó con personalidad y valentía, poniendo a casi todos sus hombres en campo rival para presionar la salida del Girona y generando peligro en los primeros minutos con un acercamiento serio de Sørloth y Guedes y un peligroso disparo de Traoré desde la frontal.
El Girona, fiel a su estilo, domó la situación a través de la posesión del balón y así logró su primera gran ocasión cerca de la media hora de encuentro en los pies de Tsygankov. Al principio al Submarino no le resultó incómoda la situación, pero con el avance de los minutos la calidad de los futbolistas ofensivos de Míchel empezó a notarse.
Todos buscaban a Dovbyk, que recibía entre Bailly y Mosquera y fue capaz de generarles problemas en varias acciones que estuvieron cerca de ser el primer gol de la noche. Quien también llevó de cabeza a los defensores groguets fue Sávio, que desbordó primero por el perfil izquierdo y después por la banda diestra provocando las cartulinas amarillas de Femenía y Baena.
Marcelino pareció tocar las teclas adecuadas en el tiempo de descanso. El conjunto catalán seguía teniendo más posesión, pero dejó de crear peligro ante un Villarreal en el que Parejo y Comesaña cerraban los carriles interiores a las mil maravillas. Cuando robaba, el Submarino tenía claro que necesitaba ser muy vertical, y así llegó el 0-1 de Bertrand Traoré.
Guedes se internó en el área a trompicones y, tras un disparo defectuoso del portugués, Traoré definió con mucha precisión para superar a Gazzaniga y hacer saltar la sorpresa en Montilivi. Como un resorte, el Girona reaccionó instantáneamente con un latigazo al larguero de Tsigankov, pero los de Marcelino se libraron del empate por centímetros.
Entraron Ilias Akhomach y Ramon Terrats para reforzar al equipo, este último para frenar a Sávio actuando como lateral zurdo. Míchel, viendo que a su equipo le faltaba imaginación arriba, metió pólvora con la entrada de Valery y Portu. Los gerundenses siguieron intentándolo sobre todo a través de centros laterales, pero tanto Jörgensen como los centrales amarillos se mantuvieron impasibles.
Los minutos finales, en los que el Girona suele remontar los partidos, el Villarreal no sufrió demasiado y consiguió cerrar la victoria con el único contratiempo de la expulsión de Kiko Femenía por doble amarilla. Ni él ni Álex Baena, que vio la quinta cartulina, estarán disponibles el próximo domingo para recibir al Madrid.
Ficha técnica
0- Girona: Gazzaniga; Èric, David López, Blind, Miguel (Valery, min. 75); Aleix García; Tsygankov (Toni Villa, min. 83), Iván Martín, Herrera (Portu, min. 75), Sávio; y Dovbyk.
1- Villarreal: Jörgensen; Femenía, Bailly, Mosquera, Cuenca (Terrats, min. 66); Comesaña (Capoue, min. 81), Parejo, Traoré (Morales, min. 81), Baena (Trigueros, min. 90+2); Guedes (Ilias, min. 66) y Sørloth.
Goles: 0-1, min. 59: Traoré.
Árbitro: José María Sánchez Martínez (Comité murciano). Amonestó a Blind por el Girona y Baena, Traoré y Terrats por el Villarreal. Además, expulsó al futbolista del Villarreal Kiko Femenía por doble amarilla.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 36 de LaLiga EA SPORTS disputado en el estadio de Montilivi ante 11.440 espectadores.