VILA-REAL (EFE). El entrenador del Villarreal, Unai Emery, ha asegurado este sábado, tras ganar al Real Valladolid (0-3) en el primer partido de LaLiga Santander, que el resultado ha sido "demasiado contundente para lo que se ha visto en el partido", ya que ha reconocido que "si el Valladolid hubiera marcado, el partido habría sido otro".
"Este partido ha seguido la misma secuencia de pretemporada, de buenos resultados y sensaciones, pero delante había un rival que venía de un ascenso, de ganar, dinámico, con jugadores de mucho toque, cómodo en su casa, ofensivos con laterales y medios puntas", apuntó.
Por eso, tenían claro, antes del choque que "había que tener la cabeza fría, tratar de llevar el balón, y no concederles, lo que se logró en el primer tiempo, en el que el Villarreal tuvo varios acercamientos al área, aunque sin goles".
En la segunda parte, tal y como ha analizado, comenzaron bien y acertaron, lo que hizo que el rival sacara su "mejor versión" obligándoles a defender, pero también el Valladolid propició espacios, que supieron aprovechar para añadir un segundo gol y, ya con éste, afrontar con comodidad lo que restaba de partido".
"Nosotros hemos tenido una efectividad muy alta y el resultado ha sido demasiado contundente", ha añadido Emery, quien ha comentado que su equipo ha "sufrido más" de lo que hubiera querido, ante el empuje de los locales tras el 0-1, con el revulsivo que produjeron sus cambios.
"Ese sufrimiento es lo lógico dentro de lo que es Primera, y más con un rival con el talante ofensivo que tiene el Valladolid que, al no marcar cuando tuvo la opción Gassama, nos permitió echar mano de la paciencia para hacer el 0-2 y ya llevar el partido hacia donde se quería".
Por último, preguntado por canteranos como Jackson o Álex Baena, Emery ha advertido que el Villarreal "es un club vendedor, desde el crecimiento de los futbolistas y comprador, de gente con rendimiento progresivo, y de cantera, pero siempre hay que tomar buenas decisiones para que haya resultados".
"Baena ha marcado dos goles, pero ha seguido un proceso, ha estado bien en pretemporada, estuvo bien en Girona y ha demostrado estar a buen nivel. Jackson también empezó la pretemporada teniendo en mente que, si progresaba, seguiría en el primer equipo; pero debe mejorar en ese último pase, y definición, algo en lo que seguiremos trabajando, desde la confianza y la seguridad. Y Yeremy Pino debutó con 17 años y ya se ha quedado. Es una exigencia de todos, club y jugadores", concluyó Emery.