España, ante su segunda final consecutiva contra Lituania

VALENCIA. La selección española masculina de baloncesto, inmersa en un mar de dudas, volverá a jugarse su futuro en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro durante la madrugada del sábado al domingo (00.00/La1), cuando la única manera de evitar la eliminación pasará por superar a la poderosa Lituania, líder invicta del Grupo B, en la reedición de la última final del Eurobasket.

Las dos derrotas iniciales ante Croacia (72-70) y la anfitriona Brasil (65-66) dibujaron un panorama muy contundente para España: una derrota más significaría la eliminación automática. Acostumbrada a sobrevivir sobre el alambre durante los últimos años, a la selección ya le notó esa abrumadora presión en su primera victoria en Río.

Fue ante Nigeria (87-96), que plantó mucha más resistencia de la esperada e hizo planear la tragedia sobre las cabezas de los jugadores españoles. Se salvaron los pupilos de Sergio Scariolo, pero no dieron el golpe de la mesa que se presumía necesario y el cúmulo de dudas se mantiene intacto superado el ecuador de la primera fase.

Ahora ya no queda margen de ningún tipo, ni siquiera por la supuesta facilidad del adversario, ya que tanto Lituania como Argentina son dos equipos talentosos y experimentados, que están mostrando buen nivel en Río y a buen seguro que no desaprovecharán cualquier momento de debilidad español.

El siguiente examen llega contra los lituanos, invictos tras superar a Brasil, Nigeria y Argentina, y deseosos de cobrarse revancha de la última final del Eurobasket de Francia, donde España se impuso con mucha claridad (80-63) guiada por Pau Gasol (25 puntos, 12 rebotes), imperial durante todo el torneo.

Los primeros avisos ya llegaron durante esta misma preparación para los Juegos, con sendas victorias de Lituania tanto en Kaunas como en Málaga. Evitar que se repita la historia pasará por que el equipo español, por momentos atenazado por los nervios ante Nigeria, recupere sus viejas señas de identidad, pueda correr a campo abierto y surjan jugadoras que reduzcan la dependencia de Pau Gasol.

Entre las pocas noticias positivas que dejó este último encuentro destacan la aparición de Juan Carlos Navarro, desaparecido hasta entonces en los Juegos, o la aportación de Willy Hernángomez para el necesitado juego interior. Se sumaron a la causa con 11 puntos cada uno, pero Scariolo necesitará 'reclutar' más soldados si quiere ganar las dos duras batallas que esperan.

En cuanto a los lituanos, jugarán mucho más sosegados porque tiene los cuartos de final en la mano y guiados por la dirección de Maltas Kalnietis (18 puntos y 9 asistencias de promedio), su mejor hombre en Río. El madridista Jonas Maciulis, el ex del Unicaja Mindaugas Kuzminskas y el pívot NBA Jonas Valanciunas se mantienen como los otros hombres fundamentales en un equipo que también está rentabilizando el crecimiento de Domantas Sabonis, hijo de Arvydas.