VALÈNCIA. La selección española femenina de balonmano tratará de dar este miércoles (20:30) el primer paso hacia los cuartos de final con un triunfo sobre Japón, en un encuentro en el que las "Guerreras" deberán apelar, más que nunca, a su intensidad defensiva para contener al eléctrico conjunto asiático.
"Japón tiene un estilo de juego extremadamente rápido, no ya en las transiciones como estamos acostumbradas a ver en otras selecciones, sino en los movimientos en el ataque posicional, por lo que tendremos que estar muy, muy atentas en defensa, porque son jugadoras a las que por sus características cuesta mucho defender", advirtió la central española Silvia Arderius.
Japón ha hecho de sus limitaciones físicas -las asiáticas no llega al 1,70 de altura de media- una virtud, con un vertiginoso juego que las permitió sorprender (28-26) a Croacia, medalla de bronce en el último Europeo, en la última jornada de la primera fase.
Liderado por la explosiva central Natsuki Aizawa, de tan sólo 1,60 metros de altura, el equipo japonés despliega un veloz juego de ataque, que les permite aprovechar cualquier mínimo resquicio en las defensa rivales.
Pero las de José Ignacio Prades no sólo tendrán que prestar atención a los movimientos de Aizawa, que suma 13 goles y 14 asistencias en el torneo, sino que tampoco deberán perder de vista a la lateral derecho Kaho Nakayama, autora de nueve tantos ante Croacia, y a la extremo Saki Hattori.
Son los pilares de un jovencísima selección japonesa, junto con la portera de origen noruego Sakura Kametani, guardameta del Besancon francés.
Este competitivo equipo pondrá a prueba la solidez defensiva del conjunto español, el factor sobre el que las "Guerreras" han cimentado las tres holgadas victorias cosechadas sobre Argentina, China y Austria en la primera fase .
"El equipo ha mostrado un buen tono defensivo en la primera fase y eso es algo fundamental, porque si la defensa funciona y la portería aporta tenemos garantías para que el equipo pueda seguir creciendo", señaló el seleccionador español.
Y es que España necesitará mostrar su mejor nivel defensivo no sólo ya para poder derrotar este miércoles en Torrevieja a la sorprendente Japón, sino para superar a Croacia y Brasil en las tres "finales" que deberá afrontar para poder acceder a los cuartos de final.
Son tres durísimos encuentros en los que las "Guerreras" intentarán volver a explotar el veloz juego de transición que han exhibido en la primera fase del torneo y que ha permitido al conjunto español minimizar sus habituales problemas en el ataque estático.
En esta faceta del juego se antoja fundamental el papel de la central Alicia Fernández, que tras superar los problemas físicos que le impidieron disputar las dos primeras jornadas del campeonato debe comenzar a crecer en la competición, al igual que el resto del equipo español, que irá viendo aumentar el nivel de exigencia camino de unos cuartos de final que las de José Ignacio Prades se han fijado como el objetivo mínimo en "su" Mundial.