VALÈNCIA. El Levante afronta este domingo una auténtica final frente al Racing de Santander, que podría incluso convertirse en todo un macth ball para Mehdi Nafti si su equipo cae derrotado. El franco-tunecino tiene la confianza de Miñambres pero vive de unos resultados que, por ahora, hunden al cuadro granota en la duodécima plaza con la plantilla más cara del torneo. Sea como sea, el técnico prepara un once que, con el carácter urgente de la cita, es complicado de dilucidar, también para un cuerpo técnico que no podrá contar con Campaña -sigue a vueltas con un tobillo que da más problemas de los debidos-, Pubill ni Mustafi. Róber Ibáñez podría regresar a la lista tras unirse a sus compañeros en la sesión completa de ese viernes.
En portería continuará Dani Cárdenas, con una línea de cuatro por delante. Vezo seguirá comandando la zaga y Postigo podría recuperar la titularidad tras perderse las dos últimas citas. En la diestra estará irremediablemente Son; en el lateral izquierdo, un Saracchi que en Andorra volvió a ofrecer un gran nivel en el primer tiempo. La medular se prevé reservada para Iborra y Pepelu, con De Frutos en el extremo derecho. Joni Montiel, clave para Nafti en sus engranajes, partirá de inicio en el enganche. Mientras, las plazas ofensivas admiten más debate. Brugui fue uno de los tímidos halos de luz la pasada jornada y Wesley, que no acaba de funcionar, podría contar con otra oportunidad en el arranque. Como posibilidades, Soldado podría acompañar al brasileño -con esa dupla inicial llegó la última victoria, la goleada al Villarreal en el Ciutat-.
Sin embargo, el buen hacer de Brugué lo coloca presumiblemente de partida y el propio Wesley podría ser el relevado por otra de las piezas en ataque: bien Soldado, bien un Bouldini que continúa su puesta del todo a punto. Con todo, el once que podría presentar Nafti en un encuentro especialmente relevante para sus intereses es el formado por Cárdenas, Son, Postigo, Vezo, Saracchi, Pepelu, Iborra, De Frutos, Montiel, Brugui y Wesley.