VALÈNCIA. La debacle copera del Levante deja dos escenarios: uno, de relajación por el espacio en el calendario de cara al próximo mes y medio; otro, de expectación, porque la humillante derrota de Pasarón dejó tocadas a algunas figuras que debían reivindicarse ante un equipo dos categorías por debajo. La realidad es que el elenco de Julián Calero adolece de ritmo de competición después del extraordinario parón por culpa de la DANA, pero el sonrojo del encuentro del martes trasciende cualquier deseo de despejarse el camino del objetivo de avanzar en Liga. Para olvidar, habrá que ganar.
Por eso Calero medita un once de gala este viernes en A Malata. Para borrar el infausto recuerdo del martes y, también, para continuar con el avance liguero. No conviene olvidar que, en caso de lograr vencer este y los dos encuentros aplazados por el temporal, el equipo volvería a las plazas de ascenso directo. Y eso significa estar en la pomada.
Andrés Fernández seguirá bajo palos -aunque esta vez será Pastor el suplente- y tendrá la habitual línea de cuatro por delante. Elgezábal apunta a continuar pese a disputar todo el choque de Copa, con Dela a su vera. Pampín será el lateral izquierdo y el derecho, Andrés García. Las decisiones sobre esa línea parecen inapelables, como la titularidad de Kocho tras su nueva concentración con Georgia.
Oriol Rey acompañará la sala de máquinas junto a Pablo Martínez y Carlos Álvarez partiendo desde el costado derecho. Morales y Brugui permutarán en punta para dar forma al que, hasta ahora, es el mejor once posible para Calero.
Por tanto, el posible once del Levante en A Malata es el formado por Andrés Fernández, Andrés García, Elgezabal, Dela, Pampín, Kocho, Oriol Rey, Pablo Martínez, Carlitos, Morales, Brugui.