VALÈNCIA. En Argentina existe una bella costumbre que indica el camino de vuelta a casa a futbolistas que protagonizaron una larga carrera en el fútbol europeo y dedican el ocaso de su carrera a su club de formación. El caso de Pablo Daniel Piatti (La Carlota, 1989) y su regreso a Estudiantes de La Plata se encuadra en esa romántica tradición que perdura en el fútbol argentino. Algo que va más allá de los focos y el dinero: es un vínculo que se crea entre futbolista y club que en Europa resulta en ocasiones difícil de entender, exceptuando unos pocos casos. Tras formarse y destacar en las filas pincharratas, Piatti cuajó una dilatada carrera en Europa para terminar regresando hace poco más de un año a Estudiantes, su casa, con el objetivo de aportar su experiencia y su fútbol al club de su vida.
"Nunca hablé de lo que siento por Estudiantes porque prefiero demostrarlo”
Pablo Piatti, jugador de Estudiantes de La Plata, para Acá hay una escuela
El sistema de competición en Argentina ha sufrido muchísimos cambios a lo largo de los últimos años. Atrás quedaron los míticos torneos Apertura y Clausura para desembocar, tras muchas idas y venidas tanto en los despachos como en el sistema de competición, en la puesta en escena anual de dos títulos denominados oficialmente Liga Profesional Argentina, que se disputa en la primera parte del año natural, y Copa de la Liga Profesional, ahora mismo en marcha y con un formato inicial de liga doméstica dividida en dos zonas que define al campeón tras tres rondas eliminatorias: cuartos, semis y final.
El rival a batir y actual campeón de liga es, como tantas veces ocurriese desde tiempos inmemoriales, River Plate. Los Millonarios, ahora dirigidos por el mítico excentral Martín Demichelis, sobrevivieron a la marcha de un Marcelo Gallardo que marcó una época y que ganó absolutamente todo en el Monumental. Para sorpresa de muchos, el Muñeco sigue de año sabático desde que pusiera fin a ocho años en el banquillo del Gallinero.
No está teniendo su mejor año en los torneos domésticos el otro gran transatlántico y archienemigo de River: Boca Juniors. Terminó séptimo en la Liga y marcha undécimo en su grupo zonal en Copa de la Liga, pero el pasado viernes cosechó un enorme éxito certificando su presencia en la gran final de la Copa Libertadores que se disputará el próximo 4 de noviembre en Maracaná.
“Queda un pasito para lo que puede ser un momento histórico”
Edinson Cavani, futbolista de Boca Juniors
Con más alma que fútbol, los discípulos del exentrenador del Elche Jorge Almirón han protagonizado un ejercicio de supervivencia en el torneo más deseado de Sudamérica dejando en la cuneta a Racing de Avellaneda (hasta hace pocos días dirigido por el exvalencianista Fernando Gago) en cuartos de final y al Palmeiras del luso Abel Ferreira en semifinales. Ambos triunfos se decidieron en la tanda de penaltis y la victoria ante Palmeiras le selló a Boca el pasaporte para una final en la que espera el Fluminense brasileño, que disputará el duelo en su feudo habitual. Mención especial a Edinson Cavani, que adelantó a Boca en la vuelta de las semifinales pero falló su pena máxima en la tanda. El uruguayo tendrá la ocasión de levantar la Libertadores poco tiempo después de aterrizar en la disciplina Xeneize proveniente del Valencia.
La falta de regularidad mostrada por Boca Juniors, acostumbrado siempre a pelear por todos los títulos hasta las últimas fechas, la han aprovechado en el campeonato liguero equipos como Talleres, San Lorenzo o Lanús, que terminaron la competición en segundo, tercero y cuarto lugar respectivamente. El club cordobés alcanzó el subcampeonato gracias en buena parte al ahora futbolista del Fútbol Club Juárez mexicano, el uruguayo Michael Santos, que se consagró máximo realizador del campeonato junto al ariete de Belgrano Pablo Vegetti, ahora en las filas del Vasco da Gama.
A un tanto se quedó el flamante fichaje de la Fiorentina el pasado verano, un Lucas Beltrán que con 22 años dejó en las arcas de River 12 millones de euros para emprender su asalto a Europa. El viejo continente se perfila como el ineludible destino de una de las estrellas emergentes en el fútbol argentino: Agustín Giay, lateral derecho de 19 años de San Lorenzo de Almagro internacional sub-20 y llamado a grandes cosas de la mano de la nueva generación de jóvenes talentos argentinos.
Razones para estar satisfechos no faltan tampoco en el Jorge Luis Hirschi de La Plata. Con el yerno del mítico Carlos Bianchi, Eduardo Domínguez, como técnico y con el mito Juan Sebastián Verón como vicepresidente, el club pincharrata parece tener muy bien marcado el rumbo con un proyecto serio y a largo plazo. La derrota ayer en casa ante Godoy Cruz y el irregular inicio en Copa de la Liga no empañan el futuro de un proyecto ilusionante.
Ilustres veteranos formados en la casa como el Pájaro Fede Fernández, que en su día fue central de Nápoles, Getafe o Newcastle entre otros; el Principito Sosa, con trayectoria en clubes como el Bayern de Múnich, Nápoles, Atlético de Madrid, Milán o Besiktas; Santiago Ascacíbar, que fue regista del Stuttgart y el Hertha de Berlín, o el propio Pablo Piatti son las referencias de un grupo joven y talentoso que dibuja un prometedor futuro a largo plazo para su hinchada. Especial seguimiento merece el extremo de 23 años Benjamín Rollheiser, que firmó 6 goles y 3 asistencias en 27 apariciones durante el campeonato liguero.
“Siempre voy a tener un recuerdo hermoso de Valencia”
Pablo Piatti, futbolista de Estudiantes de La Plata, para À Punt Esports
A sus 34 años y después de asumir el reto europeo cuando apenas contaba 19 primaveras, Pablo Piatti trata de aportar su experiencia en Almería, Valencia, Espanyol, Elche y Toronto FC para llevar a Estudiantes a cotas más altas, desafiar la tiranía de River Plate e incrementar presencia a nivel internacional, algo importante para un club que acumula en su palmarés 4 Copas Libertadores, la última de ellas conquistada en 2009 con la Brujita y el exvalencianista Enzo Pérez (River Plate) como línea medular. El técnico de aquel equipo era, por cierto, el hombre que guió a Argentina a la final del Mundial en 2014, el desaparecido Alejandro Sabella.
A título personal, el objetivo más inmediato de Piatti es recuperarse de la rotura del ligamento cruzado de su pierna izquierda que se produjo el pasado abril en un encuentro ante Talleres de Córdoba y dar con la continuidad necesaria que le permita alargar su carrera en el club que lo formó y le dio la oportunidad de mostrar su fútbol al mundo.