Exvalencianistas por el mundo: Fernando Gago

VALÈNCIA. Con permiso del inminente pistoletazo de salida del Mundial de Catar, el fútbol argentino no cesa de ocupar los titulares en lo que respecta al fútbol internacional. Tras el increíble desenlace del campeonato de liga en el que Boca Juniors levantó el título con la inestimable ayuda de River Plate (sí, han leído bien), el conjunto dirigido por Hugo Ibarra cedió en la final del llamado Trofeo de Campeones (una Supercopa argentina a todos los efectos) ante Racing de Avellaneda por quedarse con menos de siete jugadores sobre el terreno de juego. El colegiado, con el tiempo prácticamente cumplido en la prórroga y reflejando el marcador un apretado 1-2 para Racing, dio por finalizado el encuentro tras haber expulsado a siete futbolistas de Boca (cinco de campo y dos de banquillo), una circunstancia que proclamó vencedor a Racing, que también había sufrido tres expulsiones, de manera automática.

Por si el guion resultara poco original, los de Avellaneda se llevaron el título de Campeones sin siquiera haber sido campeones de liga o Copa, dos títulos cuyos trofeos descansan en las nutridas vitrinas de La Bombonera. De hecho, la Academia perdió el título de liga en la última jornada sucumbiendo ante River en El Cilindro y regalando así un nuevo éxito a los Xeneizes. Eso sí, el pasado domingo se tomó la revancha en una final que tuvo absolutamente de todo.

Para muchos, y después de la temporada completada por Racing, la justicia por fin hizo acto de presencia. El exvalencianista Fernando Gago (Ciudadela, 1986) lleva poco más de un año en el banquillo y ya ha diseñado una escuadra que ha sabido mantenerse unida ante las críticas en diversas fases del curso y que hoy ensalza con merecimiento a su técnico, un novato de 36 años que ya ha levantado su primer título. Todo hace pensar que vendrán muchos más, tanto en Argentina como en Europa.

"Gago es un técnico muy serio y por el bien de Racing ojalá pueda seguir mucho tiempo en el club"

Rodrigo De Paul, jugador del Atlético de Madrid, para Telefe

La huella que dejó Fernando Rubén Gago como futbolista no se borra fácilmente con el tiempo. Formado en la cantera de Boca, pronto encontró su hábitat natural en la posición de “5”, donde desplegó su enorme calidad con el balón en los pies. Pivote fino como muy pocos, en enero de 2007 dio el salto a Europa gracias a un Real Madrid que pagó la estratosférica cantidad de 20,50 millones de euros por un jugador todavía desconocido en las grandes ligas. Vistió también la camiseta de Roma, Valencia y Vélez Sarsfield, donde se retiró en 2020. Además, acumuló un total de 61 participaciones con la Albiceleste, con la que disputó tres campeonatos de Copa América y un Mundial.

Su palmarés avala una gran carrera deportiva: un Torneo Apertura en 2005, el Clausura de 2006, dos ligas españolas, una Copa del Rey, una Supercopa de España, cuatro campeonatos de liga argentina, una Copa Argentina, una Copa Sudamericana y dos Recopas Sudamericanas. Como internacional, ha sido campeón del mundo sub-20 y en Pekín’2008 se colgó el oro olímpico. A sus 36 primaveras y tras la victoria de Racing el pasado domingo, su filosofía de fútbol le permite seguir conquistando títulos también desde el banquillo.

Claro está que Pintita apenas mostró un ápice de su inmensa calidad en Mestalla. Registró un total de 22 discretos encuentros con la camiseta del Valencia entre julio de 2012 y enero de 2013, cuando salió cedido rumbo a Vélez. El siguiente verano volvió a la disciplina del Valencia para ser traspasado definitivamente al club donde se formó, Boca Juniors, a cambio de poco más de millón y medio de euros. Sin duda, las lesiones siempre fueron su tendón de Aquiles. Seis prolíficos años duró la segunda etapa de Gago como Xeneize antes de recalar de nuevo en Vélez Sarsfield en verano de 2019. Allí colgó las botas poco más de un año después.

“Todos dicen que me lesioné cinco veces y no que volví cinco veces”

Fernando Gago

Ni Gago pudo dejar el fútbol ni el fútbol quiso dejarlo a él. Se puso por primera vez el traje de entrenador en el modesto Aldovisi, donde trató de implantar una idea de fútbol atractiva, pero que resultó en fracaso. El equipo no funcionó y en febrero del año pasado el de Ciudadela perdió a su hermano en uno de los mayores golpes que ha recibido el exvalencianista. Como ya hizo muchas veces durante su carrera, cayó para después levantarse.

Su filosofía como entrenador se identifica muchísimo con la que marcó su ADN como jugador: la pelota raseada, las salidas limpias y la cabeza siempre levantada. Su batacazo futbolístico y personal al frente del Aldovisi no hacía presagiar en absoluto el aterrizaje en el banquillo de la Academia, un acontecimiento que despertó primero las críticas y después el afecto; el de unos hinchas que además de disfrutar con el juego de los suyos, empezaron a vibrar con un Racing valiente y ganador.

“Quiero jugar bien y ganar, ganar y jugar bien”

Fernando Gago

La juventud y la perseverancia en sus ideas son dos aspectos que etiquetan al exvalencianista como uno de los técnicos más prometedores del panorama balompédico argentino y mundial. El gran trabajo de Lionel Scaloni, escoltado por Pablo Aimar, Fabián Ayala y Walter Samuel, despeja cualquier rumor respecto al banquillo de una selección argentina que se presentará próximamente en Catar con el más que justificado cartel de favorita. Sin embargo, el futuro es incierto, más aún en este deporte, y Gago está demostrando con creces que tiene mimbres de gran entrenador. Quizá solo sea el comienzo de una larga y exitosa trayectoria en los banquillos.