VALÈNCIA. Tras el último Scudetto, logrado con mucha autoridad y suficiencia por el Nápoles de Spalletti (actual seleccionador de Italia), la Serie A se presenta este curso muy abierta con los dos históricos de Milán como favoritos al título en las apuestas, algo no tan habitual hace unos pocos años. Juventus, Fiorentina, el propio Nápoles, Atalanta y los dos romanos, que por cierto han tenido un comienzo de temporada muy irregular, aspiran a los puestos Champions League e incluso se permiten soñar con repetir la gesta napolitana.

En la zona baja el abanico de pronósticos queda incluso más abierto: un clásico que seguro resulta muy familiar a los lectores como el Udinese de Andrea Sottil no ha empezado nada bien y marca la salvación ahora mismo. Sin embargo, el que fuese duodécimo clasificado la pasada temporada es presumiblemente superior en plantilla y recursos a equipos como el Cagliari, la Salernitana de Filippo Inzaghi, el Empoli, el Hellas Verona. Tampoco quieren problemas Genoa, Frosinone, Bolonia y Torino.

Dejando atrás a clásicos como Parma, Bari, Palermo o Brescia, lograron el ansiado ascenso la pasada campaña el Frosinone, el Genoa y el Cagliari de Claudio Ranieri, que se codeará de nuevo con los grandes de la Serie A.

Partidario en los últimos tiempos de entrenadores jóvenes pero con ilustres carreras como futbolistas para su banquillo como Alessandro Nesta (actual técnico de la Reggiana de Serie B) y Fabio Grosso (actual técnico del Olympique de Lyon), ambos miembros de aquella Italia campeona del mundo de principios de siglo, el Frosinone está sorprendiendo y se sitúa ahora mismo octavo a las órdenes de Eusebio Di Francesco: el técnico responsable de aquella histórica remontada de la Roma ante el Barcelona en la Champions League 2017/2018. El español Pol Lirola, cedido por el Olympique de Marsella, y el centrocampista brasileño Reinier, propiedad del Real Madrid, son parte del proyecto del Frosinone en su gran objetivo de la permanencia.

"Nuestra Champions es lograr la salvación”

Eusebio Di Francesco, técnico del Frosinone, para Sky Sport

Otro club más acostumbrado a la élite, el Genoa, regresa esta temporada al lugar al que pertenece y que nunca debió abandonar. Al contrario que todos nosotros, Il Grifone no echará de menos en la máxima categoría a su archienemigo local: una Sampdoria que navega ahora mismo en las dramáticas aguas del descenso a Serie C. Un año más, nos quedamos sin Derby della Lanterna. Poca relevancia tiene ese detalle para otro campeón del mundo en 2006, Alberto Gilardino, que cogió las riendas genovesas el pasado diciembre, condujo al equipo al ascenso y lo tiene ahora mismo fuera del descenso. Espectacular año 2023 hasta el momento de otro futuro gran entrenador italiano.

Además del lateral izquierdo español Aarón Martín, no podemos hablar del Genoa sin mencionar al cancerbero valenciano Josep Martínez. El de Alzira aterrizó en Génova en verano de 2022 cedido por el Leipzig y el club, tras el estratosférico rendimiento en Serie B del chaval, ejecutó la opción de compra que tenía por 3,5 millones de euros. Mucha atención a este meta de 1,91 que sigue creciendo y siendo protagonista ahora en los templos más importantes del Calcio italiano.

El tercer club que consiguió el ascenso, el Cagliari, lo hizo vía playoff de ascenso. Terminó quinto en la clasificación y ascendió gracias a un tanto de su veterano capitán Leonardo Pavoletti en el minuto 94 del partido de vuelta de la eliminatoria definitiva ante el Bari. A los mandos de la nave el ilustre exvalencianista Claudio Ranieri, que agregó con este ascenso otro éxito muy especial a su exitosa y dilatada carrera como entrenador. Cumplidos ayer los 72 años, mañana buscará con su Cagliari una victoria en Salerno que con mucha probabilidad le sacaría del farolillo rojo. Partido importante y duelo directo de aspiraciones. Los nombres más reconocibles que maneja la actual plantilla rossoblu están en el frente de ataque y pertenecen al internacional peruano Gianluca Lapadula y al tanque Andrea Petagna. A seguir el joven pivote de 19 años internacional sub-21 con la Azzurra Matteo Prati.

"Creo que este Cagliari será mi última experiencia como entrenador”

Claudio Ranieri, técnico del Cagliari, para Rai Calabria

 En Italia la Serie B tiene un papel capital como vivero de jóvenes futbolistas y entrenadores. La evolución que caracteriza al Calcio actual le debe mucho al trabajo de cantera de los clubes modestos y a un cambio de filosofía que empezó a plasmarse en todas las categorías del fútbol transalpino hace ya varias temporadas. El resultado es una competición con una variedad de tendencias futbolísticas que permite a los técnicos labrar su propio estilo y a los futbolistas más jóvenes desplegar su talento.

Actualmente, los nombres de los dos primeros clasificados despiden aroma añejo: Parma y Palermo. Aún es pronto para sacar conclusiones, pero todo apunta a que veremos más pronto que tarde al actual líder de la segunda categoría en la Serie A. Refundado varias veces desde su nacimiento en 1913, el Parma fue el club que formó e hizo debutar al mítico guardameta Gianluigi Buffon (actual secretario técnico en la Federación Italiana) y donde se retiró el de Carrara el pasado verano. A pesar de los pronósticos, todo se mantendrá muy abierto hasta el final en un campeonato que se prevé apasionante con aspirantes como el Venezia, el Bari, la Cremonese o incluso el Brescia.

En las faldas de los Alpes y a orillas del lago que lleva su mismo nombre, la ciudad de Como sueña con desmontar la lógica. Su Como 1907 fue un habitual de Serie A en los años ochenta, pero hace más de tres décadas que no alcanza la máxima categoría del Calcio. Es más, la actual solo es la tercera temporada consecutiva de los Lariani en Serie B, por lo que han conocido épocas peores. Su objetivo a día de hoy es asegurar la permanencia sin renunciar al derecho a soñar: la temporada está todavía en pañales, pero los lombardos ocupan el quinto puesto en la clasificación, lo que les daría acceso al playoff de ascenso.

El futbolista valenciano formado en la cantera del FC Barcelona y en la fábrica de Paterna, Álex Blanco, permanece en la primera plantilla del cuadro italiano. No hace muchos meses, Cesc Fábregas (actual técnico del equipo sub-19 del Como) era su compañero y cerró allí su increíble carrera profesional como futbolista. Testigo de todo ello fue otro exvalencianista que también anhela volver a situarse entre los mejores del país de la mano del club de su ciudad natal. Patrick Cutrone (Como, 1998) era una de las grandes esperanzas del fútbol italiano y a sus 25 años está fuera de los principales focos del Calcio disputando la Serie B. ¿Qué ocurrió?

"He encontrado la serenidad que me faltaba”

Patrick Cutrone, futbolista del Como, para Sky Sport

 El delantero llegó a debutar con la absoluta de Italia en marzo de 2018: un premio a su tremendo registro goleador en categorías inferiores e incluso en la primera plantilla del Milán. Muchos hablaban de él como el nuevo cannonieri del fútbol italiano para muchos años, una estrella en ciernes. Ello llevó al Wolverhampton inglés a desembolsar 28 millones de euros por el atacante, que tenía difícil encontrar garantías de minutos en San Siro, y a partir de ahí todo fue a menos. Desapercibido en la Premier, se firmaron cesiones a Fiorentina, Valencia (7 participaciones sin titularidad y sin estrenar su cuenta goleadora) y Empoli con un rendimiento muy discreto que terminó dando a la postre con los huesos del ariete en su ciudad natal, donde ahora parece haberse reencontrado anotando tres tantos en las ocho primeras jornadas, siempre como titular.

Se habló de problemas personales y de tiempos oscuros que quedaron atrás, pero solo el césped pone a cada uno en su sitio. Siendo todavía un jugador joven y llevando el gol en las venas, aún está a tiempo de alcanzar su mejor nivel para hacerse un hueco en la élite del Calcio, algo que el exvalencianista sueña con hacer de la mano del equipo de su ciudad, de la tierra que lo vio nacer. Defenestrado por muchos, estos primeros dos meses de temporada invitan a pensar en el regreso de aquel joven de la cantera del Milán cuyo olfato e inteligencia dentro del área se comparaba con los de grandes estrellas y mitos del país como Christian Vieri.

Sin duda, otro aliciente para no dejar de seguir esta temporada una Serie B que pondrá fin a muchos debates y despejará muchas incógnitas.