Hoy es 6 de octubre
VALÈNCIA. Tras el golpe maestro al Valencia CF que perpetraron el banco, los políticos y la dupla Amadeo Salvo & Aurelio Martínez, a los rebeldes a la tiranía de Meriton Holdings les quedan pocos recursos en su desesperada intentona para arrebatarle el club de las manos a Peter Lim. Mientras el tirano de Singapur no decida vender, no hay salida. No hay alternativa y, si la hay, no me gusta. Necesitaríamos al doctor Stephen Strange para que explore más de 14 millones de realidades posibles y encuentre en cuál de esos futuros alternativos se puede recuperar Mestalla.
Desde el miércoles y hasta el sábado, una furgoneta rotulada con un 'Lim go home' enorme recorre las calles de Valencia en una ruta estratégicamente planificada que circula por Mestalla y su sucesor nonato de la avenida de Cortes Valencianas. El objetivo es despertar las conciencias dormidas, las desesperadas, las hastiadas y las anestesiadas. La resignación... El hartazgo, en definitiva.
A los rebeldes de Libertad VCF no les queda otra que seguir en la trinchera contra Peter Lim mientras observan como sus viejas ideas, como la de plantear una auditoria externa para conocer el coste exacto del nuevo estadio, son absorbidas por los políticos de la ciudad, siempre al quite.
En la arena política de València, todos los líderes, todos los estadistas, abusan del Nou Mestalla como arma arrojadiza a la que sacarle algún rédito electoral o, simplemente, por esa habitual e infantil estrategia política del "Y tú más" tratando de desgastar al oponente. Estos últimos meses se están propasando con el embrollo del campo y, claro, provocan rechazo, hacia ellos y hacia el apuro que tiene la ciudad en el barrio de Benicalap. Mientras, en el club se divierten con todo este fregado y arman su defensa jurídica con un documento municipal que usan, a sabiendas, para desestabilizar y presionar al Partido Popular dando dinamita, de paso, a los partidos de la oposición.
Meriton y su legión de anestesistas están ganando la disputa por el club. Han dejado a mucha gente sin ganas de pelear; gente que se ha refugiado este curso en la pelota, que en manos de Baraja y su muchachada están labrando una tierra que se encontraron yerma llena de la ceniza 'meritoniana'. Lo demás, lo que no tiene que ver con el juego: la ATE, los juzgados, el nuevo estadio, las mentiras y las tretas legales de los 'Yes men' de Peter Lim, así como el manoseo político, producen rechazo.
Por eso es tan importante el movimiento popular del sábado. Para que la gente recupere el hambre por rescatar el club. Generar otra imagen de rechazo -una más- para que Peter Lim decida soltar el VCF, que ya ha dejado caer.
Pero todo como ha sucedido hasta ahora. Con civismo. Sin radicales, sin ultras que lo contaminan todo. Que luego apagan el Cristo del Corcovado e interviene hasta la ONU. Porque llega Vinicius y sobre Mestalla estará fijada una lupa gigante rastreando al seguidor blanquinegro que, por supuesto, debería olvidarse del brasileño y no faltarle al respeto ni discriminarlo por su color de piel. El racista no tiene cabida en un estadio ni en la sociedad.
Vendrán CSI Miami, CSI Las Vegas y CSI Nueva York. Y 'Conspiração Filmes' estará en la avenida de Suecia, por supuesto. Aprovechad toda la maquinaria mediática que viaja detrás de la tropa del Real Madrid como un ejercito de titiriteros y cortesanas para difundir el mensaje contra el villano de Singapur. Sed inteligentes. Que no vuelvan a pervertir el relato de lo que suceda.
Garganta, puño y pies. Garganta para gritar, puño para alzar en señal de unidad y pies para caminar desde la plaza del Ayuntamiento hasta Mestalla con paso firme. No hay más: garganta, puño y pies. Que el mensaje llegue a Singapur alto y claro.