VALÈNCIA. (EFE).- El capitán de Bitci Baskonia, Jayson Granger, señaló este jueves que no tienen ganas de volver a Valencia y desean terminar la serie con un triunfo en Vitoria que les dé el pase a semifinales.
El uruguayo explicó en rueda de prensa que si el conjunto azulgrana “es capaz de poner el ritmo físico a nivel defensivo”, en ataque “son muy peligrosos con gente con muchos puntos en las manos”.
“Hay muchas armas, pero todo pasa por imponer el nivel defensivo que tuvimos en la primera parte e intentar estirarlo los 40 minutos”, consideró el base baskonista, que advirtió de que saldrán “con el cuchillo entre los dientes”, después de haber caído en cuatro de los últimos cinco partidos celebrados en el Buesa Arena.
“Ojalá podamos vivir esas grandes noches del Buesa", deseó el charrúa que espera vivir un gran ambiente en su feudo ante un Valencia que “tiene un juego interior muy poderoso y jóvenes con descaro”.
A su juicio “tiene muchas armas y una plantilla muy larga con un entrenador que la ha gestionado muy bien durante la temporada”.
En lo personal, Jayson Granger ahora está “contento, recuperando la confianza”. “Intento ser más agresivo que en las últimas jornadas y ayudar al equipo en lo que pueda”, comentó al tiempo que se lamentó de sus errores pasados en el tiro exterior. “No la metía ni en un piscina”, bromeó.
Opinó que “el primer partido fue muy físico y el segundo será incluso más”, ya que expresó que en la primera parte hicieron un partido y en la segunda otro en el que no pudieron darle respuesta. “Se decidirá por los pequeños detalles”, intuyó.
“Le damos énfasis a controlar pelota”, desveló el jugador, que espera que su equipo no se desconecté como lo hizo en el primer partido.
Por otro lado, preguntado por el buen momento de Simone Fontecchio, contestó que no le sorprende. “Lo vimos en las los Juegos Olímpicos, está suelto, con confianza y el cielo es el límite para él”, destacó orgulloso.
Recientemente han surgido rumores sobre la posible vuelta a Málaga del jugador uruguayo, que quiere quedarse en Vitoria y cumplir la opción que tiene en su contrato para continuar un curso más.
“Desde que me fui de Málaga siempre se ha rumoreado con mi vuelta. Estuve a gusto allí y también aquí, tengo un año más de contrato y me encantaría quedarme”, zanjó.