VALÈNCIA. Javi Gracia pone el piloto automático ante la falta de fichajes. El técnico del Valencia CF ha tomado la decisión de desmarcarse de la política de incorporaciones para la plantilla después del desgaste que ha sufrido en las semanas anteriores en una labor que considera que no es la suya.
El entrenador valencianista se ha implicado en los fichajes con el objetivo de echar una mano al club, pero la falta de movimiento a la hora de cerrar alguna incorporación ha colmado la paciencia de Gracia, que ha tomado el camino de centrarse en el fútbol sin saber lo que pasará hasta final de mercado.
"Cuando manifesté esta situación, la finalidad era esa y dejar claro cuál era mi trabajo. Intento ayudar y estoy a disposición del club, paso mucho tiempo en la ciudad deportiva, pero ya hice un esfuerzo grande cuando vi las dificultades que tenía el club para fichar y quise dar opciones. Viendo la manera de actuar del club, vi que no me corresponde hacerlo a mí porque no tiene sentido con la manera de trabajar del club. Como no tiene sentido ya no le dedico más tiempo a eso para poder centrarme en el equipo", explicó ayer el técnico.
Un mensaje contundente a la falta de determinación de la dirección deportiva liderada por Anil Murthy. El Valencia sigue esperando al movimiento final de mercado de la mano de Jorge Mendes. La labor del agente portugués se antoja clave para que Javi Gracia pueda recibir alguna herramienta para afrontar la temporada. Mientras tanto, Javi Gracia se muestra cada día más alejado de la planificación deportiva en el capítulo de entradas.