VALÈNCIA. José Viñas Ballesteros (Valencia, 31/03/1979) cuenta su salto desde el terreno de juego al banquillo, desde el chándal del entrenador a la americana del representante, y desde la agencia de jugadores al ordenador portátil. Su triple formación como entrenador, agente de futbolistas y 'scout' le da ventaja a la hora de captar talento. En el equipo de ojeadores detrás del Eintracht de Frankfurt campeón de la Copa de Alemania en la 2017/18 y campeón de la Europa League en la 2021/22 está el olfato del valenciano José Viñas. En la plantilla alemana, a modo de legado, todavía permanece el delantero centro valenciano de Montaverner, de 19 años, captado del UD Alzira, Nacho Ferri.
- José Viñas empezó su relación con el fútbol como jugador, siguió como entrenador, luego como agente y actualmente ejerce de 'scout'. ¿Por qué ese proceso?
- Es un proceso natural que se ha ido dando conforme avanzaba el tiempo y mi relación con el fútbol. En cada momento sentía la necesidad de una evolución. En mi carrera me ha venido bien ser entrenador, agente y formar parte de un club. Creo que eso me ha dado una visión más completa de todos los actores que participan en un club de fútbol. Me ha dado una formación mucho más amplía. Es algo que no busqué cuando empecé como entrenador, pero que me ha ido muy bien en todo este proceso.
- ¿Cuándo comenzaste en un banquillo pensabas en ser algo más que un entrenador?
- Cada uno tiene un proceso natural a lo largo de su carrera. Hay quien lo tiene muy claro desde el primer día y otros nos vamos ubicando en este mundillo poco a poco.
- ¿Echas de menos entrenar?
- Alguna vez tengo el gusanillo y me preguntó dónde podría haber llegado, pero dónde estoy me siento más cómodo y más capacitado.
- ¿Y cuando ves a García Pimienta, compañero de promoción, en La Palmas, en primera división, qué piensas?
- Que cada uno ha elegido un camino. Me alegro de que le vaya bien. Hice los dos primeros cursos de entrenador en Valencia y el tercer nivel lo realicé en un curso intensivo de un mes en Melilla en 2006. Coincidí con García Pimienta, Ángel Catalina, secretario técnico del Español; Andrés Fernández, director deportivo del Alcorcón; Raúl Ruiz, que fue segundo de Manolo Preciado y ha entrenado en Rusia; Joan Barbará, que está en el FC Barcelona; Raúl Agné, que ha salido del Nàstic, Rodolfo Borrell, director deportivo del Austin FC, y Carlos Planchart, scout en el Manchester City... Muchos están trabajando a gran nivel.
- Además de entrenador, tiene una diplomatura en magisterio. ¿Por qué muchos entrenadores tienen formación de maestros?
- No lo sé. Ni sé cuántos hay en ese caso, pero entiendo que los entrenadores tienen mucho de docentes. Son docentes en muchas ocasiones para los futbolistas.
- ¿En qué banquillo se sentó por primera vez fuera del terreno de juego?
- Empecé a entrenar fútbol formativo en el CF Cracks, donde estuve muchos años jugando como lateral y central. Luego me marché al Villarreal CF como segundo entrenador del Juvenil B y, por circunstancias, estuve un tiempo como primero. Acabé en el Torre Levante juvenil B de liga nacional, donde entrené una temporada.
- En ese punto deja el banquillo y pasa al mundo de la representación, ¿cómo fue ese tránsito?
- Me llamaron de una empresa de representación, Interstar Deporte. Con ellos trabajé cuatro años. Luego pasé a otra agencia, OML Sports Management donde estuve siete años trabajando como agente. Decido dar ese paso hacia la representación porque era una oportunidad para mí, en ese momento, de crecer en el sector y ampliar mis conocimientos.
- Y tras 11 años como agente se convierte en scout, lo que antes se llamaba ojeador de futbolistas.
- Me llamó Ben Manga para trabajar en el Eintracht de Frankfurt. Quería hacer una estructura de scouting. Teníamos relación porque habíamos coincidido en varios Europeos sub-19 y sub-21. Me ofreció la posibilidad de trabajar siendo el responsable de España. En el Eintracht trabajé cinco temporadas y media.
- ¿Por qué se acabó?
- Porque el director deportivo, Ben Manga, decide cerrar un ciclo exitoso y probar suerte en Inglaterra. Yo, que formaba parte de su equipo, me voy con él. Probamos suerte en otra liga.
- La de Frankfurt fue una buen experiencia
- Una experiencia increíble. Salió todo bien. El club nos dejó trabajar y confiaron en nosotros. Estaba en una situación complicada y en seis temporadas ganamos una Copa de Alemania ante el Bayern y luego la Europa League, donde eliminamos al Barça haciendo mucho ruido. Viajaba por toda Europa, viendo jugadores y luego reportaba los informes al club.
- Captó varios jugadores españoles
- Lucas Torró, que entonces estaba en el Real Madrid; Nacho Ferri, que este año está en el primer equipo del Eintracht; Fabio Blanco, que luego firmó el Barça y está en el Cultural Leonesa tras pasar por el Villarreal; y Enrique Herrero, que salió al Real Madrid.
- De la Bundesliga pasa a la Premiership inglesa
- Salimos al Watford FC, pero estamos una temporada sólo porque el director deportivo no continúa y el grupo de trabajo sale con él. El club era de Gino Pozzo, dueño también del Udinese.
- ¿Qué aprendió en Inglaterra?
- Fue una buena experiencia. Conocí una liga como la Championship, que es una gran desconocida y es distinta a muchas ligas. Es más física, más fuerte, de mucho contacto. No es tan vistosa como la Premier League, pero es tremendamente competitiva. Me llamó la atención el nivel de los futbolistas y la dureza de la competición. Es muy complicada para los equipos porque además de la liga, que es larga, están las copas. Hay mucha exigencia porque juegas domingo, miércoles constantemente.
- ¿Algún referente en el mundo del scouting?
- Monchi en el Sevilla. En la dirección deportiva es un referente por todo lo que logró, es innovador en muchas cosas. En ese primer Sevilla que formó demostró que invertir en estructura y en scouting te da la posibilidad de generar plusvalías en jugadores y conseguir, además, títulos.
- De eso se trata en su oficio: captar jugadores que proporcionen rendimiento y beneficios.
- En Frankfurt nos pasó eso con Jovic, André Silva, Rebic o Kostic. Obtuvimos plusvalías por los jugadores que trajimos y, ellos, le dieron títulos al club. Esos títulos le dan opción al club de dar un salto cualitativo a nivel de jerarquía en su liga. Se trata de traer jugadores que rindan y que, además, te generen plusvalías en una futura venta.
- Detrás de cada futbolista que se capta hay un largo proceso que va más allá del campo.
-Hay mucho trabajo previo a la firma. En Alemania o en Inglaterra vas a un mercado amplío con distintas ligas y accedes a jugadores con diferentes entornos y contextos a nivel cultural, social o económico. Una vez detectas que un jugador se adapta al perfil que demanda el club tienes que tener un conocimiento amplío de dónde viene ese jugador y conocer su realidad para saber si se va adaptar al equipo, al país y al juego o si hay que ayudarle en ese proceso.
- Sin decir nombres, ¿alguna vez has descartado a un futbolista por su entorno?
- Sí. Hay ocasiones en las que cuando uno indaga sobre la persona fuera del campo decides no incorporarlo si su entorno es conflictivo. En ese caso, entre dos jugadores que se adaptan al perfil, eliges al que no te va a dar problemas. Por eso es muy importante la información interna, personal, de cada jugador, más allá de sus habilidades.
- Luego los elegidos llegan a la plantilla y ¿qué sucede?
- Ese trabajo es del club. Cuando recibe al jugador ha de facilitarle vivienda, transporte, colegio para los niños, si es el caso... Tiene que haber una persona encargada de ayudarle en su proceso de adaptación a su nuevo entorno fuera del fútbol. Si ese proceso se hace bien, ayuda a acortar tiempos en su adaptación al juego porque el jugador se centra antes en su faceta de futbolista cuando su entorno está en calma. Eso se traslada al campo. Nosotros también estamos pendientes porque el primer contacto con ellos es nuestro.
- ¿Algún problema de adaptación que te llame la atención?
- Hay jugadores que llegan a una plantilla por puro talento, pero luego necesitan que les expliquen porqué suceden las cosas en el campo, a nivel táctico. Lo suyo es innato, hacen lo que hacen sin llegar a conocer realmente el juego. Cuando se trabaja con ellos en esa formación son mejores porque suman ese conocimiento a su talento.
- Su trabajo en el Eintracht, el más sonado hasta ahora, ¿le abrirá las puertas en España?
- Sigo en contacto con el mismo grupo de trabajo y nos llegan cosas. Estoy en ese proceso de valorar el siguiente paso. En España hay interés porque lo del Eintracht en Europa fue importante después de eliminar al Barça. Igual surge alguna opción.