VALÈNCIA. El concejal de Deportes del Ayuntamiento de València, Javier Mateo, ha asistido esta mañana a la puesta en marcha en la piscina municipal del Polideportivo de Benimaclet de un sistema de seguridad antiahogamiento que buscará minimizar las posibilidades de accidentes en las piscinas de verano de la ciudad mediante el uso de nuevas tecnologías. En concreto, se trata del sistema de seguridad valenciano Nagi Smartpool de Zonyx.
Este dispositivo va colocado en los gorros, gafas o cintas adaptadas para los nadadores que emitirá una alarma en el reloj inteligente del socorrista si detecta que el usuario permanece por debajo de los cuatro centímetros de agua más de 30 segundos. Se trata de una tecnología pensada inicialmente para el seguimiento de personas para garantizar los aforos y la distancia de seguridad y que se ha adaptado a la actividad en las piscinas.
En las piscinas de Benimaclet, Nazaret y El Palmar se han instalado antenas de Bluetooth que monitorizan en todo momento los dispositivos y, en el momento que uno de ellos deja de emitir señal, salta la alerta en el sistema, vinculado al reloj del socorrista. La pantalla le señala concretamente el punto de la piscina donde el dispositivo emitió señal por encima de los cuatro centímetros de agua por última vez.
El nuevo concejal de Deportes, Javier Mateo, ha señalado que este sistema “nos permite implementar la tecnología para mejorar la seguridad de nuestras piscinas y de sus usuarias y usuarios. De momento es una instalación que servirá de prueba para, en los próximos meses, instalarlo en las piscinas cubiertas, dado que esta tecnología nos permitirá gamificar la práctica deportiva, abriendo un amplio número de posibilidades a los bañistas, así como de obtención de valiosos datos para la gestión municipal”.
Y es que, además, este sistema permitirá contar a los nadadores la distancia, el número de largos, la velocidad o el tiempo medio por cada 100 metros. Eso posibilita que los nadadores puedan medir su rendimiento o competir a distancia al tiempo que se mejora la seguridad y se reducen las posibilidades de ahogamiento.
De momento este sistema se usará en los cursos de natación para prevenir ahogamientos en las piscinas de verano de El Palmar, Nazaret y Benicalap mientras se estudia su futura implantación en otras piscinas cubiertas de cara al nuevo curso.