GANDIA. Sofía Bernabeu es una de las pocas mujeres que ha decidido entregarse en cuerpo y alma a las carreras por obstáculos, las OCR (Obstacle Course Racing), una exigente disciplina que combina la fuerza, la resistencia y la pericia con el objetivo de cubrir en el menor tiempo posible un trazado repleto de obstáculos. “Las carreras son exactamente igual para los hombres que para las mujeres. Saltamos muros igual de altos que ellos, hacemos los Flying Monkeys, corremos la misma distancia y lo único que sí es distinto son los pesos, que son algo más bajos para nosotras”, destaca Sofía, que representará a España en los Campeonatos de Europa de OCR de Esbjerg (Dinamarca) del 29 y 30 de junio.
Lo hace tras nueve meses alejada de las competiciones por culpa de una lesión y tras reaparecer en la Egyptian Race que se disputó en mayo. Quedó segunda y esa posición junto a la insistencia de otras corredoras han hecho posible que Sofía dispute el Campeonato de Europa de Dinamarca. “Natalia Gurchencova y Lorena González me convencieron para que participara con ellas en el Campeonato y, claro, con ese equipo no pude decir que no”. Con ellas disputará la Team Championships Racing (carrera por equipos), de 15 kilómetros de distancia y 50 obstáculos a superar.
También participará en la Short Course (Carrera Corta), cuya distancia es de 7 kilómetros y consta de 30 obstáculos. Como bien explica, es una carrera rápida, donde la fuerza, resistencia, habilidad y agilidad para superar obstáculos es más importante que el rendimiento en carrera. “No quiero forzar la máquina, por eso prefiero correr la Short Course”, comenta. Participa con los pies en el suelo porque el año pasado tuvo que renunciar al Mundial de Spartan Race en el Lago Tahoe (California) por culpa de la lesión que la ha mantenido alejada de las carreras hasta ahora. Además, ahora también se juega su futuro pues las oposiciones a bombero están muy cerca y no puede permitirse una lesión: “las OCR me dan vida pero ser bombero es mi futuro y debo tener mucho cuidado en no lesionarme”.
Escasa presencia de la mujer en la élite
La gandiense viajará esta semana y lo hará sufragando los gastos ella misma. “Si no fuera por mis padres no estaría compitiendo porque los viajes los pagamos nosotros y los patrocinios son escasos”, comenta resaltando que es más fácil conseguirlo en el caso de los hombres. Sea como fuere, viajará a Dinamarca “para darlo todo” y para quitarse la espinita del Europeo de Holanda del año pasado, donde a escasos metros de la línea de meta tuvo que cortarse la pulsera —retirarse— porque su cuerpo no pudo más. “La Spartan Race de Bilbao me pasó factura y no pude terminar la carrera”.
La corredora lamenta la baja participación de las mujeres en las Spartan y en las OCR. “Somos tan pocas chicas que casi todas corremos en élite. Es una pena porque hay muchas mujeres deportistas pero que no terminan de animarse”. En su opinión, esto quita emoción a las carreras porque “cuando ves la lista de participantes hay tan pocas mujeres que ya sabes las fortalezas de cada una, mientras que los hombres son tantos que siempre hay alguno que puede dar la sorpresa”.
Es por ello que anima a todas las mujeres a probar esta disciplina que cada vez coge a más adeptos. Ella lo probó y le ayudó en muchos aspectos de su vida. Lo hizo después de practicar numerosas disciplinas deportivas (natación, escalada, Judo…) y tras finalizar su primera carrera supo que era el deporte que estaba buscando. “Participé en la Iberian Race de Gandia en 2016 porque el año anterior no pude hacerlo por problemas personales. Para mi sorpresa quedé segunda pero lo que más me gustó fue el ambiente y ese rollo guerrero que tiene la prueba”, recuerda enfatizando que la filosofía de las carreras OCR es la constancia porque “o te levantas e intentas pasar el obstáculo hasta lograrlo o te retiras de la carrera”.
Según explica, las carreras de obstáculos se dividen en dos tipos: las OCR y las Spartan. “Las OCR son de suspensión y no puedes dejarte ninguna prueba, y en las Spartan se premia la fuerza y la agilidad” y matiza: “prefiero las OCR”. De hecho, a ella le sirvieron de cierta terapia. “Cuando conozco las OCR lo hago en un momento personal muy malo. Me aferré a las carreras, a ver que destacaba, a que algo se me daba bien y me estaban dando vida”, sostiene. Por todas esas sensaciones, compartidas por otros deportistas, cree que “las OCR van a ir más porque cada vez hay más gente interesada y es un deporte de superación, no es correr una 10K sino es correrla enfrentándote a obstáculos que te vas encontrando por el camino y que debes superar si quieres seguir avanzando”.