El Valencia inicia la competición y los jugadores han pedido que se olvide dicha temporada pero ahora les toca a ellos demostrar que todo ha cambiado con respecto al año pasado pese a contar con gran parte de la plantilla y el mismo entrenador
VALENCIA. Después de 100 días el estadio de Mestalla volverá vestirse con el traje oficial de la Liga. Arranca la temporada 2016/17 y lo hace con el vasco Pako Ayestarán en el banquillo valencianista y con una plantilla que aún debe tener cambios significativos en los nueve días que quedan de mercado de fichajes hasta el 31 de agosto.
Pese a que no lo dice públicamente, el técnico espera tener configurada ya la plantilla a estas alturas de agosto, pero la realidad es que varios jugadores de los que esta noche están en la lista no seguirán como valencianistas a finales de mes. Del mismo modo que el club sigue trabajando, después de todo el verano, en reforzar la defensa. Ese fue el primer objetivo que se marcó la secretaría técnica conjuntamente con Ayestarán y aún no se ha podido fichar porque tampoco se ha podido vender a ningún central.
El técnico vasco pondrá en liza un once ante Las Palmas sin novedades donde más las reclamaba, en el centro de la zaga y, además, sin el que debe ser el fichaje más desequilibrante del equipo, Nani, que arrastra una sanción de la pasada temporada con el Fenerbahçe. En total, en la plantilla actual ocho futbolistas que acabaron la temporada a las órdenes de Ayestarán ya no están en el club (además de Yoel y De Paul que ya no estaban en mayo) y cuatro son las novedades de las que tres estarán en Mestalla esta noche, pero en los nueve días podrían ser cuatro o cinco más los que dejen el club.
En la convocatoria para medirse a Las Palmas se encuentra Mustafi pero habrá que ver si tiene sus primeros minutos con el Valencia esta temporada o si por el contrario se queda en la grada porque el Valencia está negociando con el Arsenal su salida, como reconoció Wenger. En una situación parecida a Mustafi se encuentra Abdennour, al que el club le busca salida en la Premier y Paco Alcácer sigue teniendo encima de la mesa la oferta del Barcelona, aunque el Valencia le ha cerrado la puerta a la salida.
En definitiva, muchas interrogantes sobre la composición de la plantilla y sobre como terminarán de ajustarse las piezas el próximo 31 de agosto, pero pese a eso Ayestarán sabe que no se permiten fallos y nada le servirá como excusa si se tropieza en el estreno liguero. El Valencia viene de una de las peores temporadas de su historia, siendo decimosegundo y la afición necesita que el equipo enganche desde el principio, ya que viene de un final de temporada de frustración total.
El técnico vasco es consciente de lo que se juega en el estreno. Las dudas sobre su capacidad siguen en el ambiente tras una pretemporada irregular y el inicio de competición se antoja vital. Empezar mal la competición fue lo que lastró al Valencia en las últimas temporadas donde no se consiguió alcanzar la Champions League. Así sucedió con Pellegrino, Djukic y la pasada campaña con Nuno, algo totalmente opuesto a la primera temporada del luso donde el equipo empezó como un tiro.
Pero no sólo las dudas están encima del técnico si no también sobre la composición de la plantilla. García Pitarch anunció cambios en el mes de mayo, pero los que han llegado se antojan insuficientes en gran parte de la hinchada que espera todavía más fichajes.
Mestalla abre el telón en una temporada donde solo habrá Liga y Copa del Rey. Ante Las Palmas, el once presentará pocas caras nuevas y los futbolistas que estaban la temporada pasada y que deben empezar a demostrar que todo ha cambiado con respecto al frustrante año anterior. El primer rival es la Unión Deportiva Las Palmas, un equipo que se ha ganado el respeto de la Primera División con un gran trabajo de Quique Setien y que tiene buenos futbolistas, como ya se vio la pasada campaña en Mestalla.
El Valencia echa a rodar este lunes con muchas dudas en el ambiente y a la espera de refuerzos pero la competición no espera y se debe empezar sumando de tres.