La operación de Vives entra en su fase crucial

VALENCIA. El futuro de Guillem Vives entra en una fase clave. Por el momento se espera que, a lo largo de la semana, se concrete su fichaje por el Barcelona Lassa. Todavía es pronto para dar nada por definitivo, ya que el principal objetivo del club catalán es anunciar primero la llegada del otro base, Tyrese Rice. Una vez firmado el norteamericano, Vives pasará al primer plano.

Aún así, desde el Palau Blaugrana saben cual es el único modo de hacerse con el ex del Joventut, y es el pago de la cláusula. Valencia Basket no es partidario de negociar, ni de rebajar sus pretensiones, y se acoge al millón y medio con tal de no perder al jugador. Si el Barça deposita el dinero, no habrá mayor misterio y Guillem Vives jugará de blaugrana. Si no, no hay otra fórmula posible por el momento. 

Pese a que desde el club taronja se resisten a dejar ir al base catalán, saben que su salida en los próximos días es algo más que probable, algo que obligaría a Valencia Basket a peinar el mercado en doble sentido. En primer lugar, por reforzar una posición que cojearía con la marcha de Vives; y en segunda parte, por rellenar el puesto de cupo. 

Dentro de esas dos condiciones que deberían reforzar al Valencia Basket en caso de perder a Vives, el nombre que salta a la palestra es el de Tomás Bellas. El base del CAI es cupo y es de sobra conocido por Pedro Martínez. Además, la delicada situación del club maño podría facilitar su llegada, como ya ocurrió con Joan Sastre.

Sin embargo, de cara a cubrirse las espaldas en caso de alargarse la salida de Vives, Valencia Basket podría firmar un jugador nacional para su juego interior, que reforzaría la pintura. Al nombre de Fran Vázquez, pretendido también por Gran Canaria, se le uniría el de Xavi Rey. Según Las Provincias, el club taronja valora su llegada como quinto interior, y además, también es viejo conocido del entrenador, con quien ya coincidió en el club canario.